Un nuevo estudio español reveló que realizar 30 minutos de actividad física de intensidad moderada al día o 15 minutos de práctica vigorosa, ayuda a reducir en un 16 por ciento el riesgo de muerte y disminuye la posibilidad de padecer mortalidad cardiovascular en un 27 por ciento.
El trabajo liderado por especialistas del Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) y la colaboración de los departamentos de Enfermedades Cardiovasculares, Epidemiología y Salud Pública del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), analizó las prácticas deportivas de 11 mil 158 personas durante siete años.
La población observada osciló entre los 25 a 79 años de edad, la cual efectuó 64 actividades físicas distintas, de las que se dio seguimiento a través de un programa de analítica de datos. Del mismo modo, se registraron 863 decesos a lo largo de la investigación.
“Los resultados del estudio indican que la práctica de actividad física de intensidad moderada-vigorosa se asocia con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares y de mortalidad”, advirtió el investigador Helmut Schröder, uno de los firmantes del estudio.
Además, consideró importante seguir las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la que determina que realizar 150 minutos de actividad física de intensidad moderada semanales, como caminar velozmente o bailar, y en el caso de actividad vigorosa, practicar un deporte, correr y trotar por 75 minutos a la semana, favorecerá la salud y calidad de vida de las personas.
Por otro lado, Albert Clarà, jefe del Servicio de Cirugía Vascular del Hospital del Mar recordó: “La pregunta concreta que queríamos responder era, ¿cuál es la cantidad mínima y la cantidad máxima de actividad física para optimizar los beneficios sobre la salud cardiovascular?”.
“El beneficio máximo se observa al multiplicar por cuatro la práctica de estas recomendaciones, sin que se observe un beneficio adicional al incrementar la actividad física por encima de este nivel”, agregó Jaume Marrugat, otro de los autores del trabajo, quien aclaró que no se observaron diferencias por razón de edad o de género.
Ante estos resultados, los investigadores expusieron la importancia de promover un estilo de vida saludable en las poblaciones, ya que la falta de ejercicio es responsable del 6 por ciento de las enfermedades cardiovasculares, del 7 por ciento de la diabetes y del 9 por ciento de la mortalidad prematura.
“La práctica de actividad física no sólo es una decisión individual, sino que también exige el compromiso de los organismos e instituciones públicos para facilitar el acceso a la población a entornos donde se puedan realizar fácilmente estas actividades, tanto en entornos urbanos cómo rurales”, indicaron los autores.