El evento climático que pintó de blanco una de las Ciudades más grandes del mundo. Sería la última vez que los capitalinos verían sus calles y monumentos emblemáticos bajo una fría capa de nieve de cerca de 5 centímetros, siendo también la nevada más recordada, y que no solo cambió el paisaje urbano, también demostró que los servicios de emergencia no estaban preparados para el clima invernal.