TUXTLA GUTIÉRREZ.- El Papa Francisco pidió a las familias de México “echarle ganas” para mantenerla unida porque dijo, es el núcleo más importante de la sociedad.
Durante su encuentro con familias en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el jerarca católico escuchó cuatro testimonios de familias representativas en donde se incluía el de una familia con un integrante en situación de vulnerabilidad, un matrimonio tradicional de más de 50 años de casados, una pareja de divorciados vueltos a casar y una madre soltera.
En su mensaje el Sumo Pontífice advirtió que la precariedad amenaza a las familias mexicanas, ya que la escasez y el no tener lo mínimo para sobrevivir puede desesperar a las personas, haciéndolas sentir angustiadas.
“La precariedad no sólo amenaza el estómago, y eso ya es decir mucho, sino que puede amenazar el alma, nos puede desmotivar, sacar fuerza y atentar con caminos o alternativas de aparente solución pero que al final no solucionan nada”, dijo el pontífice en su mensaje.
En ese contexto, resaltó que es cierto que vivir en familia no siempre es fácil y muchas veces puede ser “doloroso y fatigoso” pero prefería una familia herida, que intenta todos los días conjugar el amor, a una sociedad enferma por el encierro y la comodidad del miedo a amar.
“Prefiero una familia que una y otra vez intenta volver a empezar a una sociedad narcisista y obsesionada por el lujo y el confort. Prefiero una familia con rostro cansado por la entrega a rostros maquillados que no han sabido de ternura y compasión”, destacó.
Finalmente, el Papa Francisco rezó por las familias mexicanas y dijo que la sociedad católica cuenta con un plus: “Tienen a la madre: la Guadalupana, quien quiso visitar estas tierras y eso nos da la certeza de tener su intercesión para que este sueño llamado familia no se pierda por la precariedad y la soledad. Ella está siempre dispuesta a defender nuestras familias, nuestro futuro; está siempre dispuesta a “echarle ganas” dándonos a su Hijo”.
Cabe señalar que a este encuentro asistió el obispo de la Prelatura de Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas y también estuvieron presentes más de 600 católicos de Quintana Roo pertenecientes a diferentes apostolados de la familia de Quintana Roo. Así mismo, durante dicho evento 20 matrimonios renovaron sus votos.