Aguacates es uno de los productos que más deja al país

Los ingresos resultado de exportaciones mexicanas empiezan a cambiar el color del oro, dejando de lado el negro por el verde, luego de que en 2016 el aguacate reportara un superávit de 2 mil 220 mdd.

El aguacate ya es uno de los productos que más dinero le deja al país, incluso por arriba de los hidrocarburos en términos netos. Mientras el comercio exterior del petróleo y sus derivados le dejó a México en 2016 un déficit de 13 mil 163 millones de dólares, el ‘oro verde’ reportó un superávit de dos mil 220 millones de dólares, según datos del Sistema de Información Arancelaria Vía Internet (SIAVI) de la Secretaría de Economía.

El año pasado se alcanzó el récord en las exportaciones del fruto tanto en ingresos como en volumen, al colocarse 1.022 millones de toneladas en 31 países donde Estados Unidos concentra el 77 por ciento del total.

Por ello, en Michoacán, principal estado donde se cultiva, los productores de aguacate no le temen a la renovación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pues saben que las exportaciones no bajarán, que EU seguirá demandando aguacate; sin embargo, sí están buscando otros mercados y aprovechando la diversificación que ya tienen.

Por ejemplo, si la relación con el vecino país se complicaría, los productores del fruto voltearían a Europa, también venderían más a Japón, que es un gran consumidor de aguacate, aunque exigente en la calidad, pero que lo paga a buen precio, detalló Juan Carlos Grayeb, productor.

“Nosotros nunca nos hemos cerrado a venderle a otros países como Japón y Francia, por decir un país, porque más bien es la entrada para Europa. Estuvimos hace unos meses en la Península Arábiga también para llevar este fruto fresco, está muy lejos, estamos viendo si hacemos un puente aéreo porque ahora es prácticamente imposible llegar, son más de 40 días en barco y no alcanza a llegar”, afirmó.

CADENA DE GRAN VALOR

En los últimos dos años, la demanda de aguacate por parte de China y Holanda muestra un crecimiento relevante en la empresa Empaque RV (Ramón Valencia), ubicada en Uruapan y en donde se empaca el aguacate que procede de diferentes municipios del estado, principalmente de Tancítaro.

Heriberto Becerra, director operativo de la firma, explicó que tan sólo en lo que va del año han enviado alrededor de 15 embarques de 20 toneladas cada uno hacia Europa, pero se espera que esto crezca más conforme avance el año.

“El encargado de ventas está trabajando para tener esos clientes satisfechos, ofreciendo más calidad y eso está abriendo puertas en varios mercados”, expresó.

Por su parte, Ramón Paz, consultor de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM), en este ciclo de cosecha (junio 2016-julio 2017) esperan exportar a Estados Unidos arriba de 900 mil toneladas, cantidad por encima de las 860 mil que se exportaron durante el periodo 2015-2016.

Agregó que a Japón esperan exportar unos 52 mil toneladas de aguacate, tres mil más que en la temporada pasada y a China 20 mil, lo que representa nueve mil más que en el periodo junio 2015 a julio 2016.

En 2016 la venta de aguacate creció de manera importante en Asia y Europa, donde Alemania y Holanda, tuvieron los aumentos más altos en la exportación, 237 y 283 por ciento, respectivamente; sin embargo, el grueso sigue estando en Estados Unidos.

De acuerdo con la Secretaría de Agricultura (Sagarpa), una hectárea de aguacate genera ingresos por 600 mil pesos al año, mientras que una de maíz da 24 mil pesos.

Sin embargo, para que un árbol de aguacate de fruto, desde su plantación se tienen que esperar entre cinco y siete años.

Así, la primera cosecha, que se realiza al quinto año de vida del árbol, se obtienen alrededor de 50 frutos en ese ciclo, en el sexto año alcanza 150 frutos y 300 en el séptimo.

El aguacate puede cultivarse desde el nivel del mar hasta una altura de 2 mil 500 metros, pero se recomienda que se realice en elevaciones entre 800 y 2 mil 500 metros; la distancia de siembra, en general debe ser desde los siete metros hasta los 12 metros de distancia entre sí.

Después del corte se envía al empaque, ahí se lava, se empaca y se sube a los camiones.

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