Aguakan: ¿A dónde va el agua de tu baño? Así es su recorrido y tratamiento

CANCÚN, 18 de marzo.— ¿Alguna vez te has preguntado a dónde va el agua después de jalar la cadena del inodoro? Descubre qué pasa entre el inodoro y su tratamiento.

El agua, una vez que sale de nuestros baños, se convierte en agua residual, un líquido cargado de desechos orgánicos y químicos que requiere un tratamiento especial. Este proceso, aunque es un viaje que la mayoría desconoce, es crucial para la salud pública y el medio ambiente. Sin él, los cuerpos de agua como ríos, lagos y océanos sufrirían una grave contaminación.

¿Cómo se trata el agua residual?

El proceso comienza en nuestras casas, oficinas y escuelas, donde el agua utilizada en inodoros, duchas y lavabos se mezcla con otros residuos. A través de una red de tuberías subterráneas, esta agua residual es transportada a plantas de tratamiento, donde se inicia un complejo proceso de purificación.

Los sistemas de saneamiento juegan un papel fundamental en la protección de la salud pública, al crear entornos limpios que previenen la propagación de enfermedades, especialmente aquellas que se transmiten por vía fecal-oral.

El agua residual es el resultado del agua que utilizamos en nuestras actividades diarias, y que contiene una mezcla de desechos orgánicos e inorgánicos. Esto incluye heces, restos de alimentos, productos de limpieza, jabones, grasas y, en algunos casos, vertidos industriales.

En las plantas de tratamiento, el agua residual pasa por varias etapas:

  1. Se eliminan los sólidos grandes mediante rejillas y sedimentación.
  2. Se utilizan procesos biológicos para descomponer la materia orgánica.
  3. El agua es desinfectada para eliminar bacterias y virus.

Fuente: Aguakan.

Este tratamiento es esencial para prevenir la contaminación de ríos, lagos y océanos. Sin él, el agua de nuestros baños podría convertirse en un foco de enfermedades y dañar ecosistemas enteros. Además, el agua tratada puede ser reutilizada para riego agrícola, industrial o incluso para recargar acuíferos subterráneos.

¿Cómo podemos ayudar a conservar el agua?

La gestión responsable del agua es una responsabilidad compartida que requiere la participación de todos. Cada uno de nosotros puede marcar la diferencia a través de acciones sencillas pero significativas:

En el hogar

En la comunidad

En el trabajo

Cada uno de nosotros puede contribuir a la gestión responsable del agua de nuestros baños. Al comprender y valorar este proceso, podemos trabajar juntos para proteger nuestra salud y el medio ambiente.

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