El optimismo generalizado sobre la recuperación de la economía se une en el caso del mercado del petróleo a los recortes que mantendrán, salvo sorpresa, los países de la OPEP+ en la reunión que celebrarán mañana. El resultado es una escalada en el precio del petróleo hasta superar los 40 dólares, sus máximos desde el inicio de marzo.
En menos de mes y medio el precio del petróleo ha completado un vuelco que ha llevado su cotización desde los -37 dólares que alcanzó en el ‘crash’ del pasado 20 de abril hasta los +37 dólares. El barril tipo West Texas, de referencia en EEUU, roza en su escalada los 38 dólares.
Más simbólico aún es la conquista que alcanza el barril de Brent, de referencia en Europa. La racha alcista continúa, y en la jornada de hoy supera la barrera de los 40 dólares. Su cotización no alcanzaba este nivel desde las primeras jornadas de marzo, justo antes de que la renta variable tocara fondo en sus desplomes.
La contundencia del rebote ha sorprendido a varias firmas de inversión, que aplazaban la conquista de los 40 dólares hasta bien entrado el tercer trimestre del año.
El optimismo sobre el ritmo de recuperación de la economía tras el parón por el coronavirus, con la ayuda de los continuos estímulos, acelera las previsiones de recuperación de la demanda de crudo.
En las últimas jornadas, sin embargo, los focos se desplazan al lado de la oferta. La denominada OPEP+, los países de la OPEP más aliados como Rusia, ultiman un acuerdo de cara a la reunión que celebrarán mañana.
A pesar de las discrepancias que persisten entre países como Arabia Saudí y Rusia, los analistas dan por hecho un pacto para prorrogar los recortes récord de producción aprobados en abril, de 9,7 millones de barriles diarios, el equivalente a cerca del 10% de la producción previa al estallido de la crisis.
La propuesta de Arabia Saudí pasaba por mantener estos recortes prácticamente hasta los últimos meses del año, mientras que desde Rusia se mostraban reacios a prorrogar la magnitud de los recortes actuales. El consenso esperado por los analistas pasa por prolongar los recortes actuales durante julio y agosto, y antes del 1 de septiembre celebrar otra reunión para valorar posibles cambios en la estrategia.
La propuesta de la OEP+, junto al derrumbe actual de la producción por parte de la industria estadounidense del ‘shale oil’ debido a los bajos precios posibilitarían un mayor equilibrio en el mercado del petróleo. Los analistas, de hecho, advierten de la posibilidad de que en unos meses se pase del excedente actual de crudo a un déficit, una situación que permitiría reducir los niveles acumulados de inventario.