Tras la disolución de un grupo de élite antinarcóticos que trabajó junto a la DEA en la captura de Joaquín, El Chapo, Guzmán en 2016, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que dicha unidad estaba infiltrada por el crimen organizado y que “incluso uno de sus jefes está siendo juzgado en Estados Unidos”.
En conferencia en Palacio Nacional, el mandatario reiteró que ya no son los tiempos de Felipe Calderón en los que la delincuencia estaba infiltrada en el gobierno y tan es así que las armas del operativo Rápido y furioso fueron usadas en asesinatos.
Eso sucedió hace más de un año, ya con el cambio de política, porque mantenemos cooperación con organismos internacionales encargados de seguridad, pero procuramos que se respete la soberanía y antes entraban y salían por el país, ellos mandaban, hacían lo que querían, incluso fabricaban delitos, entonces ya saben que se puso orden y se tiene una relación de cooperación con respeto a nuestra soberanía”, dijo.
López Obrador sostuvo que hay buena relación con el Gobierno de Estados y pese a esta medida que fue notificada a la DEA en abril de 2021, continúan las acciones bilaterales de seguridad, pero con respeto a la soberanía nacional.
El esquema ideal, dijo, sería que se comparta información para actuar de manera conjunta en operativos y acciones que convengan a las dos naciones.
“En este caso que se ha manejado incluso por nuestros adversarios, Enrique Krauze, que se mete en todo, decía que cómo íbamos a cancelar a un grupo que se dedicaba a enfrentar a la delincuencia como si nosotros no hiciéramos nada, como si fuéramos paleros, chalanes, no, les falta información y se demostró que ese grupo estaba infiltrado por la delincuencia, que incluso uno de sus jefes está siendo juzgado en Estados Unidos, pero no investigan nada más atacan”, mencionó.
Aseguró que su administración continúa con las labores para garantizar la paz y la seguridad en el país y sin violar los derechos humanos, pero también sin la intervención de gobiernos extranjeros.
“No a violaciones de nuestra soberanía, no a que operen grupos extranjeros en funciones que sólo corresponden a las autoridades mexicanas, no a la violación de derechos humanos, no a masacres, no a la tortura, todo eso está claro y se cumple diariamente”, dijo López Obrador.