Cancún, 12 de enero (Gilda Piña) Continúan los avances en la construcción del Puente Nichupte con el fin de recuperar el tiempo perdido con las afectaciones del mal tiempo en los últimos meses, por lo que se observa la maquinaria operando, en labores de colado de pilotes y en proceso fijar las bases y columnas que sostendrán la estructura de la magna obra.
Quienes se encuentran realizando esta obra se apoyan en un equipo experto de biólogos a fin de evitar la contaminación y analizando la barrera de retención de sedimentos, al mismo tiempo que se elaboran estudios con análisis de calidad del agua en el sistema lagunar Nichupté y estudios del manglar.
Sin embargo, el mal tiempo durante las últimas semanas ha retrasado la obra que al cierre del 2023 reportaba un 36 por ciento de acuerdo con la Secretaría de Infraestructura de Comunicación y Transportes (SICT), cuya inauguración está programada para marzo de este año.
Por ahora la SICT infirmó que se encuentran trabajajando a marchas forzadas en la obra de 8.8 kilómetros, cuatro carriles, 1 de ciclovía y 3 vehiculares de 3.5 metros de ancho para conectar la ciudad de Cancún con la zona hotelera.
Con este puente se busca aliviar el congestionamiento vial, dando una segunda alternativa de circulación a los miles de autos que diariamente recorren la zona hotelera de Cancún, los cuales solo cuentan con dos carriles para entrar y dos carriles de salida.
Ante la magna obra en proceso, que tendrá un costo de 7,056 millones de pesos, ambiestalistas han vertido sus opiniones sobre el impacto que generará en el sistema lagunar, con efectaciones en por lo menos 18 especies de fauna y flora.
Entre las especies que estarían en riesgo son los cuatro tipos de mangle: rojo, negro, blanco y botoncillo; hierbas de tortuga, palma chit y cacerolitas de mar, además de aves, como los pericos, pecho sucio y frente blanca.