Con un registro oficial de cien mil personas desaparecidas y no localizadas, que cada día crece, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió este jueves a la Cámara de Diputados una iniciativa para la creación del Centro Nacional de Identificación Humana.
A través de un proyecto de Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas, la iniciativa propone la creación del Centro como una unidad administrativa dentro de la Comisión Nacional de búsqueda de personas, con autonomía técnica y operativa.
“Tendrá como estrategia fundamental la búsqueda generalizada desde una metodología de enfoque masivo y de acuerdo con las necesidades, aplicará un enfoque híbrido para el correcto tratamiento forense de los cuerpos y restos humanos de personas sin identificar, que se recuperen de las fosas comunes y de inhumación clandestina, que no hayan sido identificadas”, señala el documento.
Los objetivos principales serán crear un sistema forense multidisciplinario enfocado en la identificación de personas desaparecidas; coordinar y ejecutar las estrategias de búsqueda e identificación en el estado o región de cobertura bajo un enfoque masivo e incrementar las probabilidades de identificación y brindar a los familiares de las personas desaparecidas.
También se busca que tenga un enfoque específico y focalizado en la búsqueda e identificación de personas humanas, a fin de garantizar su derecho a la verdad.
El documento destaca que el gobierno de la República tiene como prioridad la búsqueda de personas desaparecidas y en caso de que se encuentren sin vida, la identificación de sus restos óseos. “Este derecho a la búsqueda en la identificación como parte del derecho a la verdad implica, por un lado, tener certeza sobre las personas a la cual se ha localizado y, en su caso, hacer una entrega digna a sus familiares y por otro, saber quién le sucedió a la persona desaparecida para poder garantizar una investigación efectiva como parte del derecho de acceso a la justicia”.
El gobierno federal señaló que en 2019 únicamente existían 217 laboratorios y 263 anfiteatros, además de que la mayoría de las entidades federativas cuenta apenas con una capacidad para identificar el 20% de los cuerpos que reciben, al tiempo que las instalaciones para almacenar los cuerpos tienen una sobreocupación de al menos 40%.
México cuenta con un registro, de 100 mil personas desaparecidas y no localizadas, según cifras oficiales de la Secretaría de Gobernación (Segob), aunque la cantidad podría ser mucho mayor, debido a que hay familias que no denuncian por miedo o desconfianza en las autoridades.
El Estado mexicano reconoció por primera vez en este sexenio una profunda crisis en materia de desapariciones, pero también en materia forense y de justicia, que fue creciendo a partir de 2006, cuando se registró un repunte en la desaparición de personas, fenómeno que permanece hasta nuestros días.
En este contexto, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha subrayado que es compromiso y prioridad la búsqueda e identificación de todas las personas desaparecidas.