Ante la inconformidad que generó en la comunidad de Cancún la destrucción parcial de la ciclopista localizada frente al fraccionamiento “Villas Pescadores”, en la zona turística de esta ciudad, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) aceptó devolver la ciclovía a su sitio original.
A través de un comunicado, el Fonatur señaló que nunca fue su intención “privar a la población” de la ciclovia, que es patrimonio de la Federación; aclaró que la venta reciente de lotes en el fraccionamiento “Villas Pescadores”, fue entre dos particulares, uno de ellos, comprador original en 1979 de los predios, a este organismo. Sobre la merma de servicios que corre por debajo de la ciclopista, se indicó que sigue siendo propiedad federal y recibirá mantenimiento del Fonatur como hasta ahora.
“Esta obra fue considerada con el objetivo de generar un beneficio para todos los ciudadanos, tanto para los que disfrutan de la ciclopista, como para los que carecen de opciones de estacionamiento en la zona, evitando el caos vial, sin afectar los espacios públicos”, se indicó.
Los trabajos que iniciaron el 27 de diciembre del año pasado sólo contemplaron realizar nuevos trazos de la ciclopista, a fin de facilitar el acceso al estacionamiento de los establecimientos que se ubican en “Villas Pescadores”, así como el adicionar ocho metros a la vialidad.
En entrevista el delegado de Mantenimiento Turístico del Fonatur, Fernando Cervantes Mondragón, explicó que se les solicitó recorrer la ciclopista para abrir un acceso al estacionamiento que se habilitará para los inmuebles que se localizan en el fraccionamiento, donde será construida una tienda de conveniencia.
Rechazó que con ello se beneficiara a un particular, a costa de mover el trazo original de la ciclopista, la primera habilitada como tal en México y patrimonio cultura de Cancún,
El funcionario consideró que en realidad era una medida preventiva para evitar que a esa altura del bulevar Kukulkán —kilómetro 2.7-3.5— se generase un caos vial con la entrada y salida de vehículos.
Cervantes Mondragón respondió que el 7 de enero, el ayuntamiento de Benito Juárez expidió la anuencia para realizar las obras, lo cual desmiente la versión del secretario de Ecología y Desarrollo Urbano, Francisco Zubirán Padilla, quien declaró durante toda la semana pasada que la administración del alcalde Remberto Estrada no había expedido tal documento.
Si bien existen testimonios acerca de que para recorrer la ciclopista, se talaron más de cinco árboles originales, el delegado de Fonatur aceptó la tala de uno sólo y admitió que no se solicitó el permiso —obligado— que debió tramitarse ante la Dirección General de Ecología.
Celebración ciudadana. Tiziana Roma, una de las pioneras de Cancún quien, junto con otros fundadores de la ciudad, encabezaron las protestas por la destrucción de la ciclopista, reconoció la apertura al diálogo por parte del Fonatur y, especialmente, de Cervantes Mondragón “por dar la cara” a la ciudadanía, debido a que la mayoría de los funcionarios rehúyen o se esconden para rendir cuentas.
Hizo un reconocimiento a la ciudadanía que se unió y aportó tiempo y dinero para movilizarse en contra de las obras que, sostuvo, atentaban contra el patrimonio cultural de Cancún.
“Lo que más me emociona es la fuerza ciudadana”, resaltó.