A poco tiempo del destape de los candidatos oficiales para estas elecciones del 2021 muchos siguen peleando un espacio como carnívoros hambrientos de poder. El precio no es caro -para ellos- y hasta hacen alianzas con enemigos y fuman la pipa de la paz solo para obtener lo que quieren, aumque sabemos que esa tregua durará solo el tiempo de elecciones.
El “chapulinear”, tan mal visto hace unos años, ya no les importa y es cosa común; saben o al menos piensan que aún pueden engañar a muchos ciudadanos. Para ser sincera, al menos los principales partidos políticos en el estado ya han perdido toda la credibilidad con los quintanarroenses cansados de sus falacias.
“Se han recuperado dos veces y quedaron sepultadas sus malas intenciones para hacernos pagar el precio por acompañar al presidente de México”. Estas palabras sonaron y retumbaron en varios funcionarios que usaron el desaparecido Partido Encuentro Social para su beneficio.
Y una de las causas en Quintana Roo de su desaparición fue el pleito constante por obtener el liderazgo entre Gregorio Sánchez y Carlos Mario Villanueva Tenorio, pero la principal fue la mala administración de Greg Sánchez que incluso lo llevó a perder el registro de Encuentro Social Quintana Roo, (ESQROO) el 5 de enero de 2021 por falta de afiliados.
En la pasada columna adelanté que daríamos detalles del trabajo del Diputado Gustavo Miranda, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (JUGOCOPO), en el Congreso local. Para empezar, recordamos los contratiempos de su Plan de los primeros 100 días que fue puro anuncio publicitario, pues su inexperiencia quedó evidenciada fuertemente cuando los trabajadores del congreso lo confrontaron con los despidos injustificados.
De las 28 iniciativas donde figura el Verde Miranda, 23 han sido turnadas y únicamente 5 atendidas. Y en el acuerdo que logró que la Red Feminista Quintanarroense los deje entrar al Congreso, presumió una victoria pírrica, ya que ellas siguen teniendo el poder. El diputado del Verde Ecologista no ha logrado nada, pues el acuerdo de urgente y obvia resolución por el H. XVI Legislatura, solo es un paso para la lucha de las mujeres.