MIAMI, 13 de junio.- El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump ha sido arrestado y permanece bajo custodia en espera de la lectura de los cargos en su contra.
Esta es la segunda vez en poco más de dos meses que el exmandatario republicano comparece ante un juez. La primera vez fue a principios de abril en Nueva York por el pago secreto de 130,000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels a cambio de su silencio sobre una relación extramatrimonial.
En esta ocasión, Trump se presenta ante un tribunal federal de Miami para enfrentar 37 cargos relacionados con el escándalo de los papeles de Mar-a-Lago.
Entre los cargos se encuentran 31 acusaciones por retención intencionada de información de defensa nacional contenida en documentos, tres por ocultar y guardar documentos de las investigaciones federales, dos por falsedad y uno por conspiración para obstruir a la justicia junto con uno de sus empleados. Es la primera vez que un expresidente se enfrenta a delitos federales, en este caso, siete en total.
Trump llegó a los juzgados con 70 minutos de antelación a la hora programada para su comparecencia y ha sido fotografiado en el vehículo que lo transportó desde su resort de golf en Doral, ubicado en el condado de Miami, donde pasó la noche, hasta el juzgado. En las imágenes, se le puede ver saludando a los fotógrafos desde el interior del vehículo.
La nueva imputación de Donald Trump ha polarizado a Estados Unidos. Mientras que para algunos sectores del país esta citación es una muestra de que nadie está por encima de la ley, los seguidores del expresidente y su firme candidatura para las elecciones de 2024 creen que sus adversarios están utilizando el sistema judicial estadounidense para socavar sus posibilidades de regresar a la Casa Blanca.
En medio de esta situación, el presidente Joe Biden ha guardado silencio. Sin embargo, él mismo está siendo investigado por otros documentos clasificados encontrados en su residencia de Delaware durante su tiempo como vicepresidente bajo la administración de Barack Obama. La diferencia en este caso radica en que los documentos son menos comprometedores y no se le acusa, a diferencia de su predecesor, de obstruir a la justicia.