El veracruzano Paul Uscanga juega para el Atlante desde los 17 años, siente lo que son los colores y por eso quiere ayudar al equipo para que regrese lo más pronto posible a la primera División.
Por lo pronto, el mediocampista ya aportó dos goles a la causa azulgrana en este torneo, el más reciente anotado el viernes pasado en la visita que hizo el Irapuato a Cancún.
Paul Uscanga anotó el gol de la diferencia en el triunfo 2-1 del Atlante cuando se jugaban los últimos minutos.
Tras la anotación el festejo fue muy especial, pues en la tribuna estaba su hijo Matías recién nacido al que le acercaron a la cancha para festejar.
-Fue un momento muy bonito, lo más importante fue el resultado que sacamos en un partido complicado y al final todo se me da. Tuve un par de oportunidades que desaproveché pero Dios me regaló la revancha y todo se da para ese bonito festejo. Yo soy un hombre muy feliz, soy un hombre de familia, amo a mi esposa mis hijos, toda mi vida son ellos y eso es lo que a mi me da fuerzas -agrega.
Reconoce que en este momento atraviesa por un buen momento, con participación en el equipo, anotando algunos goles importantes.
-La verdad que es muy hermoso tener a tu bebé recién nacido, a tu hija y todo se ha ido dando. La familia es lo más importante, he sentado cabeza y eso me fortalece y me hace un jugador diferente- agrega.
Señala que si bien el torneo está arrancando ya se ve un entendimiento en el medio terreno que deja en claro que las cosas van por buen camino y así lo confirma el paso del equipo.
En ese sentido, subraya que se ha sentido mejor, adaptándose al sistema de juego y que además se siente con más experiencia que puede aportar grandes cosas al club.
-Lo más importante es que se den los resultados en casa para que la afición se empiece a acercar y nosotros podamos seguir avanzando-puntualiza.
Además, reitera que tanto de visitante como local se tienen que buscar la mayor cantidad de puntos posibles.
Por otra parte, en el entrenamiento vespertino llegó la visita inesperada del equipo completo de futbol del Colegio NYACK, de Nueva York, disfrutaron de la práctica y no perdieron el momento de tomarse fotografías con el plantel de fondo en el estadio Andrés Quintana Roo.