Chacón Mantilla, la mente brillante que erró el camino

Palco Quintanarroense

Tenía un prometedor futuro como deportista, se destacaba por su liderazgo, agilidad mental y física, era la estrella de las “Aguilitas” en el fútbol americano infantil y luego en “jabalíes” de la juvenil de Cancún, -uno de los deportes con mayor disciplina-, pero algo sucedió y se desvió del buen camino.

Alejandro Chacón Mantilla, hoy es uno de los delincuentes más peligrosos de Quintana Roo, precisamente por su inteligencia y liderazgo y que puso en jaque a las autoridades policiacas municipales y estatales, incluso estuvo a punto de registrarse un enfrentamiento entre elementos de seguridad pública y de la judicial (hoy ministerial) por un supuesto intento de evitar su arresto, sobre la avenida Xcaret, justo frente a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE), a pesar de que tenía amigos de ambos lados.

Chacón Mantilla llegó a ser policía Judicial del Estado, aunque no estuvo mucho tiempo en la corporación, pero si lo suficiente para conocer a la perfección a policías y criminales.

Decide entonces conformar una banda delictiva y perpetrar atracos millonarios y con violencia, como en la comisión federal o en joyerías importantes de la zona hotelera de Cancún.

Se fuga de los custodios

Era escurridizo y se ganó el apodo de “El fantasma”, pues además de listo, era protegido por algunos judiciales, hasta que finalmente fue capturado el 30 de enero de 2003, donde incluso preso, se le veía con una amplia sonrisa en el rostro, muestra de su irreverencia.

El 16 de mayo de 2004, cuando era trasladado hacia el juzgado cuarto penal, (que en ese entonces se localizaba sobre avenida Nader, a un costado del Palacio Municipal de Cancún, de manera por demás “inverosímil” o mejor dicho con complicidades de algunos policías, se les escapó de la patrulla de traslado con todo y esposas –mal colocadas desde luego-, en la gestión de Jorge Parra Moguel.

Chacón Mantilla se fue del estado y tuvieron que pasar varias semanas para su recaptura en la delegación Iztapalapa de la ciudad de México, tras ser boletinado en todas las procuradurías del país. Entonces es trasladado bajo estrictas medidas de seguridad a Quintana Roo, incluso amarrado y esposado en una especie de carretilla al estilo “Hannibal Lecter” del Silencio de los Inocentes, y custodiado por una veintena de policías federales.

Fue ingresado primero al penal de Cancún, donde incluso conformó un gran equipo de fútbol americano con diferentes reos.

Tan es así, que el entonces director del penal recibió una carta de uno de los equipos en donde jugaba Marco Martos, -mexicano que estuvo durante 8 temporadas en la NFL Europa, para que los equipos Barcelona Dragon`s y Cologne Centirions- jugaran en el penal con el equipo de la cárcel.

Tras su traslado al penal de Chetumal, se hizo el protector del pederasta Jean Succar Kuri, a quien cuidaba de otros reos, aunque poco duró, pues fue trasladado a otros penales del estado, como el de Cozumel y Playa del Carmen, donde conoció a otros delincuentes y poco tardó en conformar otra banda delictiva donde planeaban sus “golpes”, mismos que llevarían a cabo una vez en libertad.

Se une a “Los Zetas”

De hecho, mucho se ha dicho que en prisión conoció a integrantes de “Los Zetas”, a quinees se unió y una vez fuera de prisión siguió con su carrera delictiva en Cancún y Playa del Carmen donde se le achacan varios delitos, entre ellos el sangriento asalto a custodios de una empresa de valores en la Plaza comercial Centro Maya, en agosto de 2016.

Luego de que se le giraron varias órdenes de aprehensión por delitos diversos, Chacón Mantilla fue detenido en Playa del Carmen, donde hasta el momento permanece custodiado y de un momento a otro será trasladado a alguno de los penales de la entidad.

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