Con la presencia de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) la francesa Christine Lagarde, inició un juicio por presunta negligencia contra la máxima responsable de la institución financiera internacional.
La audiencia comenzó poco después de las 14:00 horas locales (12:00 GMT), en una sala del Palacio de Justicia de la capital francesa en la que Lagarde entró “serena” y sonriente, sin realizar declaraciones a la numerosa prensa presente en la puerta de la corte.
Lagarde será juzgada por la Corte de Justicia de la República, un tribunal de excepción creado para juzgar delitos cometidos por miembros del gobierno francés durante el ejercicio de sus funciones, que sólo se ha reunido cuatro veces anteriormente.
La titular de la dirección del FMI va a ser juzgada en el marco del denominado “Caso Tapie” por haber cometido una presunta “negligencia” en un arbitraje “privado” que ordenó cuando era ministra francesa de Economía (2007-2011) del ex presidente conservador Nicolas Sarkozy.
El arbitraje fue presuntamente “irregular” y se saldó con la concesión de 403 millones de euros (423 millones de dólares) al cambio actual, de dinero público, al empresario galo Bernard Tapie.
La Justicia reprocha a la ex ministra francesa el procedimiento escogido para resolver la reclamación de Tapie por la reventa por el banco francés Credit Lyonnais de la multinacional deportiva Adidas y que Lagarde no apeló la resolución favorable al ex patrón de la firma deportiva.
Si Lagarde es considerada culpable podría ser condenada hasta un año de reclusión y 15 mil euros de multa (15 mil 900 dólares).
La sentencia será pronunciado el próximo martes día 20, aunque Lagarde podría solicitar un último amparo.
Christine Lagarde ha afirmado siempre haber actuado en este asunto en el interés del Estado francés y respetando la ley francesa.
Hasta el momento el Fondo Monetario Internacional ha dado su apoyo a su directora gerente pero algunos medios franceses consideran que si Lagarde es condenada debería renunciar y dejar el cargo.
Los jueces del caso, magistrados pero también diputados y senadores, entre ellos una diputada socialista, interrogarán a Lagarde y a diez testigos entre los que figuran dos ex ministros franceses.
El caso contra la directora del FMI ocupa 10 tomos de alrededor de seis mil páginas.
Los abogados de la abogada y ex ministra del ex presidente conservador Nicolas Sarkozy presentaron sucesivos amparos para evitar que Lagarde fuera juzgada pero todos fueron rechazados.
El caso, cuyo origen es el litigio del empresario por la reventa por el banco francés Credit Lyonnais de la multinacional deportiva Adidas, persigue a Lagarde desde hace años pero no le impidió renovar su mandato a principios de este año en el Fondo Monetario Internacional, que le sigue otorgando su confianza.
A finales del año pasado, el empresario que se benefició del arbitraje, Bernard Tapie, fue condenado a devolver los 403 millones de euros que percibió en 2008 fruto del arbitraje del que Lagarde era la máxima responsable.