Ciudad de México, 25 de abril de 2025 — La presidenta Claudia Sheinbaum instruyó a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congelar las cuentas bancarias de los propietarios de empresas acusadas de simular procesos de manufactura a través de compañías “fachada” que operaban bajo el programa de exportación IMMEX, informó este jueves el secretario de Economía, Marcelo Ebrard.
Durante la conferencia matutina presidencial, Ebrard detalló que se detectaron importaciones masivas libres de arancel que no cumplían con los fines de exportación establecidos, lo que constituye un fraude al sistema comercial mexicano.
“Ya cerramos las principales. Una sola empresa de esas, en un año, importó más de 10 mil millones de pesos. Ya se clausuraron sus actividades”, declaró el funcionario. Además, confirmó que por instrucción directa de la presidenta, “se solicitó a la UIF congelar las cuentas de los propietarios, cosa que ya se hizo”.
Según la Secretaría de Economía, las empresas señaladas utilizaban el esquema IMMEX para introducir productos terminados sin arancel, IVA ni ISR, para después comercializarlos dentro del territorio nacional, en detrimento de la industria mexicana formal. “Representa una competencia desleal”, advirtió la dependencia.
Como parte del denominado Operativo Limpieza, también se han aplicado sanciones a agencias aduanales implicadas en las operaciones fraudulentas. “Se solicitó la cancelación de la licencia o patente de agencias aduanales. Todo eso se está haciendo hoy. Es una realidad”, señaló Ebrard.
Cinco empresas han sido canceladas por su participación en el esquema: Kaizen Incy Co Production de Tijuana; Soluciones Empresariales MH Fashion y Philkor Trends, en Ensenada; y Grupo Maquilador Sin Frontera, en Zapopan, Jalisco. En conjunto, estas firmas realizaron importaciones por más de 9 mil millones de pesos.
Adicionalmente, se revocaron programas IMMEX a empresas en Aguascalientes y Baja California por operaciones simuladas en la importación de textiles confeccionados, con un valor superior a los 15 mil millones de pesos.
Ante cuestionamientos sobre medidas contra el contrabando de productos de origen chino, Ebrard recordó que el gobierno impuso un arancel general del 35 por ciento a los textiles, para frenar la competencia desleal de productos que se venden a precios por debajo de los costos nacionales. “No es a un país. Es un arancel general. Vemos productos demasiado baratos que afectan a nuestra industria”, explicó.
Estas acciones forman parte de una estrategia más amplia del gobierno federal para depurar el comercio exterior, combatir el contrabando y proteger la producción nacional en sectores sensibles como el textil y la manufactura ligera.