Felipe de Edimburgo, de 99 años de edad, continúa hospitalizado después de que ingresara a un hospital de Londres desde hace varias semanas, precisamente, el lunes fue trasladado a un nosocomio diferente para realizarle unos exámenes cardiacos.
El palacio de Buckingham dio a conocer que Felipe de Edimburgo fue operado del corazón con éxito, debido a una condición preexistente, y ahora continuará con su tratamiento.
Ante el estado de salud del duque de Edimburgo, ahora la preocupación es que su título nobiliario se conserve, pues es uno de los más importantes que da la Casa Real británica y podría estar en riesgo de extinguirse.
Duque de Edimburgo, un título muy valioso
El ducado escocés fue creado en 1726 por el rey Jorge I para dárselo a su nieto Federico y desde entonces solo lo han portado cinco personas, todos familiares directos del monarca.
El príncipe Felipe es el primer hombre en llevarlo por su matrimonio con un miembro de los Windsor, pues el padre de la reina Isabel, Jorge VI, se lo concedió en la víspera de su boda en 1947.
A fin de conservar el título nobiliario, en 1999 se decidió que lo pasaría a otro miembro de la familia real. El elegido fue el príncipe Eduardo, el menor de los cuatro hijos de la reina Isabel II.
Carlos ya era príncipe de Gales y además había recibido el ducado de Cornualles el día de su boda con Lady Di. Andrés adquirió el ducado de York desde su matrimonio con Sarah Ferguson. Eduardo es el conde de Wessex, por lo cual sería la única opción para recibir el título de duque de Edimburgo.
Los títulos subsidiarios al ducado de Edimburgo son conde de Merioneth y barón Greenwich. Algunas versiones aseguran que en los próximos años habrá una reducción en los miembros de la Corona británica.
El motivo por el cual es importante conservar el título nobiliario es porque la única forma en la cual la Casa Windsor puede sobrevivir al siglo XXI es manteniendo solo a la descendencia directa, por ello toma gran preocupación la edad del príncipe Felipe de Edimburgo.