Felipe Carrillo Puerto, 17 de febrero.- El párroco Martín Ribas celebró hoy la misa de ceniza, como parte del inicio de los actos de preparación previos a la Pascua, con una mínima asistencia y respetando la sana distancia, para evitar la aglomeración de personas que puedan ser foco de contagios del coronavirus.
Durante su homilía, el párroco expresó la importancia de demostrar mediante la fe a Dios el respeto hacia unos de los días en el que tuvo que sacrificar su vida, pero por sobre todo el dolor que sufrió en esos días, y es por ello que la congregación católica y en especial sus feligreses con el ayuno también muestran su devoción.
Indicó que el ayuno es un acto de fe y respeto, pero no significa dejar de comer porque sea pecado, sino que, si uno está acostumbrado a cenar mucho alimento, al momento de aceptar el ayuno uno puede disminuir la comida a una mínima parte y hacer un pequeño sacrificio y con ello uno podría obedecer o conmemorar uno de los actos importantes para la vida cristiana.
Antes de finalizar, el párroco señaló que las misas que hoy inician serán de alguna manera controladas a fin de evitar contagios del coronavirus, por lo que la iglesia ha tomado también sus medidas de seguridad y en esta ocasión, debido a la pandemia que aún persiste entre la población, la colocación de ceniza ha sido modificada, por lo que para evitar el contacto con los feligreses, el párroco dejará caer la ceniza sobre la cabeza de las personas.
Por último, destacó que para evitar la aglomeración de personas verificarán el cumplimiento de las medidas como la sana distancia el uso de cubre bocas con el aforo de misas de solamente un 30 por ciento, por lo que invitó a la comunidad católica sugirió no salir sino es necesario pero llamó a reforzar la fe y orar a que pronto todo se normalice. (Infoqroo)