Minutos después de que obtuvo las firmas de la mayoría de los diputados de Morena, para respaldar a Reyna Durán Ovando como coordinadora de la fracción morenista y, por ende, presidenta de la Junta de Gobierno y Coordinación Política de la XVI Legislatura, Yeidckol Polevnsky, líder nacional de ese partido, realizó algunas llamadas telefónicas claves para respaldar a la legisladora.
Ese 15 de diciembre una de las mujeres fuertes dentro del primer círculo del presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo en Cancún para atestiguar el informe de actividades legislativas de los diputados federales Mildred Ávila Vera y Jesús Pool Moo.
Dicho sea de paso, Yeidckol Polevnsky y ningún otro dirigente morenista de peso nacional estuvo en el informe de los demás legisladores morenistas por Quintana Roo, de modo que su presencia en el mencionado evento cobró especial relevancia, sobre todo por las palabras cálidas con las que arropó a Mildred Ávila y Pool Moo.
Luego de ese evento, realizado en el norte de Cancún, se dirigió a un local de fiestas perdido en las laberínticas calles de Bonfil, cerca del aeropuerto, para participar en una comida que terminó en los primeros minutos del día 16.
Allí fue donde entre las 18 y 23 horas del 15 de diciembre pasado se pactó hacer a un lado a Edgar Gasca, a quien los morenistas habían identificado como incondicional de la senadora Marybel Villegas Canché.
Dos meses antes hubo un primer intento por hacer a un lado a Gasca, pero los coordinadores de las demás fracciones parlamentarias lo respaldaron con argumentos colgados de alfileres, con los que únicamente le dieron vida artificial unas cuantas semanas más.
Pero en esa ocasión Yeidckol Polevnsky no hizo la tarea completa. Esa vez no llamó a los demás coordinadores parlamentarios para informarles personalmente de la decisión de Morena. Ahora fue diferente… y es que los fracasos son los mejores maestros.
A cada uno de sus interlocutores les dijo que Edgar Gasca formaba parte de una corriente política que va en contra de los lineamientos del morenismo.
“Ya viste que hasta pretendieron incumplir el compromiso de que Arturo (Castro) sea nombrado secretario general. De no haber sido por el apoyo de ustedes, no lo habríamos logrado”, dijo.
Y es que alentado por Marybel Villegas, a principios de septiembre Edgar Gasca pretendió imponer a un incondicional de la senadora en ese puesto clave en la administración del Congreso, pese a que desde agosto existía el acuerdo, por no decir instrucción, que Arturo Castro, un político de basta experiencia política y administrativa de Solidaridad, se hiciera cargo de esa posición.
“Nuestra alianza es fuerte, de largo plazo… Vamos juntos el próximo año (2020) en dos estados y en el 2021 haremos lo mismo en 15 entidades que renovarán gobiernos y estarán en competencia más de 3,000 cargos”, le dijo aparentemente a un interlocutor del partido Verde.
“Con Reyna vamos a trabajar mejor”, le dijo a otro.
… Y Reyna tomó en sus manos la gobernabilidad del Congreso en momentos polémicos y todo parece indicar que está logrando reencauzar la vida institucional de la XVI Legislatura.
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