CIUDAD DE MÉXICO, 24 de noviembre.— Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, aceptó que la reforma constitucional electoral no pasará en el Congreso de la Unión, por lo que avanzará en el ‘plan B’ que tiene su Gobierno: modificar las leyes secundarias en la materia.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador detalló que este plan B consiste en lograr “ahorros” para que no sea costoso organizar las elecciones en el país.
“Como no lo aceptan (la oposición), pues vamos a presentar una ley que sin infringir la Constitución nos permita de todas maneras lograr ahorros para que no sea tan costoso como lo es el organizar las elecciones, y que en esa ley se prohíba, pero de manera terminante, la compra del voto, esas son de las dos cosas que van en la ley”, dijo.
“Lo de la Constitución ya engañaron a muchos, de que queríamos destruir al INE, les diría que me quedo con eso, porque fue una mentira de una desproporción que les debería dar vergüenza, no solo a los publicistas, a los que echaron a andar esta campaña y la pagaron, sino a los que se lo creyeron, porque les zumba que saques una cartulina diciendo ‘el INE no se toca’, ‘no vamos a permitir que se destruya al INE’, ‘no vamos a permitir que desaparezca el INE’, pues eso fue lo que hicieron”, apuntó.
Las Comisiones Unidas de Reforma Política-Electoral, Puntos Constitucionales, así como de Gobernación y Población de la Cámara de Diputados, presentaron este miércoles el dictamen de la Reforma Electoral.
La diputada morenista Graciela Sánchez Ortiz, presidenta de la Comisión Política-Electoral, detalló que el dictamen, detiene 935 páginas, tiene com eje principal la iniciativa enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.