CHETUMAL, 9 de mayo.- En un giro controvertido, el magistrado Mario Aguilar Laguardia, del Tribunal Superior de Justicia de Quintana Roo (TSJQROO), ha concedido una suspensión definitiva a su primo, Sergio Zapata Vales, en el caso conocido como Andara.
Este fallo se produce a pesar de una sentencia firme y cosa juzgada emitida por un Tribunal Colegiado de mayor jerarquía, que ordena conectar al fraccionamiento a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA).
El hecho plantea serias dudas sobre posibles actos de corrupción, ya que se percibe una clara intención de evadir la aplicación de la sentencia del Tribunal Colegiado, instancia federal. Se sugiere que esta maniobra busca obstaculizar la consumación de una decisión judicial federal que ya se encuentra en fase de ejecución.
Es importante destacar que Aguilar Laguardia no solo es familiar directo del interesado, sino que también reside actualmente en el complejo residencial Andara, sin pagar cuotas de mantenimiento ni los supuestos excesos en el cobro del agua.
Esta situación plantea un evidente conflicto de intereses, el cual no parece importar al magistrado al emitir una sentencia a favor de la empresa, en claro desacato a la autoridad federal.
Este no es el primer señalamiento de conducta cuestionable que recae sobre el magistrado Aguilar Laguardia, quien ha sido acusado en el pasado de poner la justicia al servicio del mejor postor. La situación planteada en el caso Andara subraya la necesidad urgente de abordar la corrupción en el sistema judicial de Quintana Roo y garantizar la imparcialidad y la transparencia en los procesos judiciales.