Madrid/Milán/Washington.— Mientras el coronavirus avanzó ayer sin control por todo el mundo, con 119 mil 295 contagios en más de 100 países, y 4 mil 291 muertes, los gobiernos tomaron medidas draconianas. Por ejemplo, España ordenó la cancelación de todos los vuelos procedentes de Italia; partidos de futbol a puerta cerrada y escuelas sin clase.
Con mil 695 contagios y 36 muertos, la nación es una de las más afectadas del mundo y la más tocada de Europa por detrás de Italia y Francia. El domingo únicamente registraba 589 casos. “Estamos ante una emergencia sanitaria que vamos a superar (…), vamos a tener semanas difíciles, pero lo vamos a lograr”, dijo el presidente Pedro Sánchez.
Entre las medidas tomadas, las autoridades españolas cancelaron del 11 al 25 de marzo todos los “vuelos directos desde cualquier aeropuerto situado en la República de Italia a cualquier aeropuerto situado en el Reino de España”, según la decisión publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El gobierno llamó a las empresas a ajustar los horarios de sus trabajadores o a autorizarlos a trabajar desde sus casas. El poderoso Banco Santander pidió a sus empleados en Madrid trabajar a distancia.
En las regiones españolas más afectadas como Madrid se tomaron medidas complementarias, como la suspensión de todo evento público en espacios cerrados que agrupe a más de mil personas.
El Parlamento español anunció el aplazamiento por una semana de su sesión plenaria, en momentos en que uno de los líderes del partido de extrema derecha Vox, Javier Ortega-Smith, dio positivo al Covid-19.
“Todas las medidas que estamos tomando están encaminadas a no ir al escenario de Italia”, dijo el ministro de Sanidad, Salvador Illa.
Italia, el país más afectado por detrás de China, llamó el lunes a sus 60 millones de habitantes a quedarse en sus casas para frenar el brote.
En Nueva York, Estados Unidos, el gobernador Andrew Cuomo anunció el despliegue de la Guardia Nacional a un suburbio de la ciudad para ayudar a combatir el mayor foco de los casos que se tiene conocimiento, mientras se intensificó la lucha contra la enfermedad.
Cuomo dijo que tres escuelas y otros lugares de reunión serán cerrados durante dos semanas en una zona de contención en New Rochelle, el epicentro de un brote de más de 100 casos. Las autoridades dijeron que los elementos de la Guardia Nacional ayudarán a limpiar espacios públicos y a entregar alimentos a personas en cuarentena en casas de la zona. En otros frentes, más escuelas y universidades enviaron a los estudiantes a casa, se cancelaron conferencias y otros eventos, y Naciones Unidas anunció que cerraría al público su sede de Nueva York y suspendería las visitas guiadas. En Massachusetts se declaró estado de emergencia.
En Oakland, California, continuó el desembarco de cientos de pasajeros del crucero Grand Princess, afectado por al menos 21 casos del Covid-19. Los pasajeros estaban siendo trasladados a bases militares de Estados Unidos donde estarán en cuarentena. En el estado de Washington, el gobernador Jay Inslee anunció nuevas normas para los centros de atención geriátrica de revisar a los trabajadores de salud y limitar las visitas.
En Kentucky, el gobernador Andy Beshear dijo que las residencias de ancianos administradas por el estado restringirán severamente las visitas, y pidió que los centros privados hicieran lo mismo. Se han detectado seis casos en el estado.
Las medidas se tomaron mientras el presidente Donald Trump aseguró que estaba dispuesto a hacerse la prueba para saber si está contagiado, pero que su médico le dijo que no era necesario.
En Chile, donde el primer caso de coronavirus se detectó hace una semana, los casos llegaron a 17.
El Ministerio de Salud de Chile determinó establecer una cuarentena obligatoria de 14 días para todo viajero que ingrese al país y haya estado previamente en España o Italia.
Además, mientras Bolivia reportó sus primeros dos contagios, Panamá informó sobre su primer muerto y suspendió las actividades multitudinarias. La Organización Mundial del Comercio (OMC) anunció la suspensión de sus reuniones hasta el 20 de marzo tras confirmarse del contagio en uno de sus empleados en su sede de Ginebra y el Banco Interamericano de Desarrollo aplazó su reunión anual en Colombia.