Luego de que la semana pasada el presidente Enrique Peña Nieto promulgó las leyes que componen la reforma energética, el gobierno federal completó su programa de cambios estructurales planteados durante la campaña presidencial con el que, se prometió, México dejará atrás la era de crecimiento económico mediocre para transitar hacia una nueva etapa de mayor dinamismo y desarrollo.
Las reformas educativa, política, fiscal, financiera, telecomunicaciones y energética fueron aprobadas en ese orden desde febrero de 2013 a la fecha. Fueron casi 20 meses en los que los partidos políticos representados en el Congreso de la Unión hicieron de todo: pactaron, acordaron, chantajearon, transaron, se fueron de fiesta a Puerto Vallarta con cargo al erario y de pilón los legisladores se aprobarán incentivos económicos por concretar esos cambios legales.
Aunque la reforma educativa fue la primera, durante todo el ciclo escolar anterior ni se vio ni se sintió, pero fue pretexto para un conflicto magisterial que afectó a casi 20 entidades federativas, incluyendo a Quintana Roo donde los profesores le robaron más de 60 días de clases a los estudiantes, sin que hubiera consecuencias.
Sin embargo, una de las principales medidas de la reforma, la contratación de nuevos profesores con base en un examen a los aspirantes, se aplicó en julio pasado para seleccionar a quienes debían cubrir las plazas que se abrieron para el ciclo escolar 2014-15 en regiones como la zona norte de Quintana Roo por la creciente demanda educativa.
Casi el 70% de los 1,800 profesores que aspiraban a una de las nuevas plazas reprobaron los exámenes, confirmando así que las deficiencias en el sector educativo se encuentran desde las raíces mismas de la formación de quienes son puestos frente a un grupo para enseñar el camino a las futuras generaciones de mexicanos.
Asimismo, en octubre próximo arrancará el primer proceso electoral que organizará el Instituto Nacional Electoral, que en los hechos es una nueva pirámide que empieza a construirse sobre la sólida estructura del IFE que los partidos políticos decidieron desechar.
En ese proceso electoral se estrenarán disposiciones como el que el 50% de las candidaturas esté en manos de mujeres y en los estados donde haya elecciones locales, si se concretaron las reformas estatales correspondientes, los alcaldes, regidores y diputados que sean electos podrán aspirar a la reelección inmediata.
Quintana Roo se encontrará con ese mismo escenario en las elecciones de 2016.
La reforma fiscal está en marcha con todas y sus consecuencias negativas en la economía, incluyendo menos recaudación y una disminución superior al 3% en las inversiones turísticas, según dijo hace unos días Pablo Azcárraga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET).
La financiera no ha impedido que los bancos en México sigan siendo los más rentables, no por lo que ganan al prestar dinero, sino por las altas comisiones que cobran por la disposición de efectivo o el manejo de cuenta.
Hoy en día tener dinero en una cuenta bancaria significa entregarlo a una ordeña imparable.
Las reformas en telecomunicaciones y energética apenas pasarán a su etapa de instrumentación. Se ha dicho hasta el cansancio que beneficiarán a todos los mexicanos, pero habrá que verlo en la práctica. Por lo pronto las telefónicas siguen cobrando tarifas por minuto y no por segundo, como dice la nueva ley.
Hay quienes dicen que la instrumentación de las primeras reformas estuvo secuestrada por las negociaciones de las leyes secundarias de la reforma energética, pero que una vez que éstas han sido promulgadas, entonces el gobierno federal debe “meter segunda” y acelerar.
Porque después de las negociaciones de las reformas, lo más difícil será justamente instrumentar los cambios, que éstos aterricen.
México es como un gran crucero, un trasatlántico de última generación que navega sin rumbo fijo. Se supone que las reformas estructurales significan fijar objetivo viento en popa. ¿Cuánto tiempo tardará el viraje? ¿Se hará a tiempo?
¿En verdad México se dirigirá a un destino seguro? ¿Será cierto que las reformas nos llevarán a mares tranquilos o representarán riesgos que en el camino nos obligarán a parar en algún puerto para hacer nuevas reparaciones? ¿Tú qué crees Lector?
Platea
Una vez que se concretaron las reformas estructurales hay quienes dicen que se acabó la política y empezará la guerra electoral. Que el video escándalo panista de Puerto Vallarta es apenas el aviso. ¿Será verdad?
Luneta
A casi un mes de que los presidentes municipales rindan su primer informe de gobierno, algunas encuestas de opinión indican que Paul Carrillo de Cáceres, en Benito Juárez y Mauricio Góngora Escalante, en Solidaridad, son los que tienen la aceptación más alta entre los habitantes de su municipio, incluso, por arriba del 70%. En política esas notas son consideradas muy altas.
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