Cancún, 12 de abril.- Agentes policiacos expulsaron a más de 200 trabajadores de la construcción, que diariamente se instalan en el Parque de El Crucero, impidiendo que acuda gente a traerles de comer, como ya venía sucediendo desde hace dos semanas.
Por años, este parque ha sido punto de reunión para albañiles, fontaneros, eléctricos, chalanes y otros trabajadores, en búsqueda de ser contratados para alguna obra; sin embargo, desde que inició la actual emergencia sanitaria, por el COVID-19, dejaron de recibir trabajo, empezando a padecer hambre. En respuesta, distintas agrupaciones y ciudadanos han acudido al lugar a llevarles de comer, lo que hacía que regresaran al lugar, pese a no existir posibilidad de trabajo.
Hoy, sin embargo, ayer, agentes policiacos acordonaron el parque con cinta y les indicaron a los presentes que se retiraron. Tres sujetos fueron detenidos por resistirse a salir, en tanto que hoy continúa la vigilancia de la zona, interviniendo los agentes para impedir que gente traiga de comer.
Víctor Martínez Alvarado, albañil desempleado, les dijeron que tenían la advertencia de irse de la zona, pues “no los quieren ver”, ni siquiera alrededor de parque, sino que deben regresar a su casa.
“Quieren que estemos encerrados, pero no tenemos qué comer. Hay quienes se pusieron al brinco, y a tres se lo llevaron con esposas ayer”, comentó.
Indicó que varios han recibido sus despensas en sus hogares, pero al no tener estufa o gas, de poco sirve esta ayuda.
“Éste”, dijo, apuntando a un compañero, “tiene tres hijos, éste cuatro, yo tres. Varios aquí no tienen qué comer”, comentó. “Llegó una familia a traer comida. Hicimos cola, y apareció la policía y nos corrieron a la ching… a la familia también”.
Ya les dijeron los policías que no dejarían que les dejen comida, por lo que mejor se regresen a sus casas, algo que muchos se resisten a hacer.