La policía argentina detuvo este miércoles a un hombre por haberle lanzado un artefacto explosivo en las inmediaciones de la residencia presidencial de Olivos, en la provincia de Buenos Aires, donde pese a la explosión no se registraron heridos, informaron a Efe fuentes policiales.
El detenido, un hombre de más de 45 años, presuntamente lanzó el explosivo en uno de los márgenes de la residencia del presidente Alberto Fernández, y según las fuentes se escuchó una explosión similar a la de un artefacto de pirotecnia.
La residencia presidencial fue en las últimas horas uno de los lugares de protesta de agentes de la policía de la provincia de Buenos Aires, que este miércoles suman su segunda jornada consecutiva de reclamos por sus condiciones laborales, que según los manifestantes incluyen bajos salarios y deterioro en el material de protección.
El Gobierno nacional anunció la semana pasada un plan de seguridad para la provincia que incluye el despliegue de más efectivos federales y la compra de materiales como cámaras de seguridad o coches patrulla.
El jefe de Gabinete del país, Santiago Cafiero, detalló las medidas de un plan que incluirá el despliegue de 3 mil 957 nuevos agentes federales en la provincia, con lo que se duplicará el número actual, la adquisición de 2 mil 200 vehículos policiales, cámaras de seguridad y otros elementos de protección, y la creación de 4 mil “paradas seguras” con botones anti pánico.
Cafiero adelantó también la construcción de 12 nuevas unidades carcelarias, que agregarán 5.000 plazas al sistema penitenciario en la provincia y que permitirán “trasladar a los reclusos de las comisarias a estas dependencias”.
Según los datos del Gobierno, de los 48 mil 565 detenidos en la provincia, 5 mil 471 se encuentran en comisarías.