CHETUMAL, 2 de junio. Por primera vez en diez meses, el presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó un acto público en Quintana Roo, al que acudieron 1,200 personas para presenciar la entrega de 120 títulos agrarios a mujeres.
También es el primer acto público que encabeza en el gobierno de Mara Lezama Espinosa, que comenzó el 25 de septiembre pasado. López Obrador no había liderado un evento público desde el 31 de julio anterior, cuando puso en marcha las obras de construcción del puente vehicular Nichupté y fue increpado por madres buscadoras, quienes le reclamaron que no cumplió su promesa de ayudarlas en la búsqueda de sus hijos desaparecidos.
Después de ese incidente, López Obrador ha seguido visitando Quintana Roo cada dos semanas para supervisar en privado y en helicóptero las obras del Tren Maya, del aeropuerto y del Parque del Jaguar en Tulum.
Bajo un toldo instalado frente a la bahía de Chetumal, con un intenso calor en el que las mujeres trataban de mitigar los efectos del clima tropical con abanicos de mano, López Obrador estuvo acompañado por Mara Lezama y habló sobre las ventajas del programa “Mujeres por el Acceso a la Tierra”, el cual se encarga de atender sentencias agrarias a favor de las mujeres.
Se entregaron 125 documentos agrarios para reivindicar sus derechos, brindarles seguridad jurídica en su patrimonio y garantizar el bienestar de sus familias. También se puso en marcha una “Jornada de Justicia Itinerante” con 39 juicios sucesorios que permitirán regularizar los derechos sobre la tierra de mujeres herederas de titulares de derechos agrarios.
Durante su intervención, el presidente de México recordó que se está invirtiendo mucho en Quintana Roo y expresó que seguirán las inversiones, así como todos los programas de bienestar. López Obrador reiteró que el Tren Maya estará operativo en diciembre “llueva, truene o relampaguee”.
En su discurso, hizo lo que él llamó un paréntesis para enviar un mensaje a las maestras de educación indígena, quienes aprovecharon la visita del presidente para manifestar su inconformidad con una iniciativa para reformar la educación indígena, lo que implicaría su reubicación de la Secretaría de Educación Pública (SEP) al Instituto Nacional de Pueblos Indígenas.
“No va a cambiar el sistema de educación indígena. Va a seguir igual que desde hace varios años. Ustedes, las maestras y maestros indígenas, seguirán perteneciendo a la Dirección de Asuntos Indígenas de la SEP”, subrayó. “Ya di instrucciones para detener esa reforma”, aseguró.
Al acto asistieron el procurador Agrario Luis Hernández Palacios Mirón, el titular de la Sedatu Román Meller Falcón, la presidenta del Tribunal Agrario Maribel Méndez de Lara y Beatriz Gutiérrez Müller, esposa de López Obrador.