La novela de Santiago Giménez, la Selección Mexicana y el Mundial Qatar 2022 terminó este lunes, luego de que el entrenador argentino Gerardo Martino dio a conocer la convocatoria definitiva, y en la que no aparece el futbolista surgido de las fuerzas básicas de Cruz Azul.
Y es que en los últimos meses y desde su llegada al futbol de los Países Bajos, el futbolista de 21 años generó mucha expectativa con sus actuaciones, ocasionando que la opinión pública se volcara a su favor para estar en la lista final del Tata.
“Sé que Dios tiene preparado un camino para mí y estoy tranquilo en esa parte”, dijo en entrevista para mediotiempo el delantero del Feyenoord, quien desde el 2019 ha abrazado la fe y ha llevado su vida personal y profesional de la mano de una relación con Dios.
“Con calma, estoy tranquilo. Sé que la gente y los medios pueden expresarse. Al final lo tomo con tranquilidad. He sentido el apoyo de la gente y eso me ha motivado mucho a dar lo mejor de mí y solo tratar de demostrar lo que realmente soy”.
Una cuestión de fe
Santi fue bautizado en enero del 2019 en un hotel al sur de la Ciudad de México por quien entonces fuera su compañero en La Máquina, Igor Lichnovsky. Esa decisión, señaló, cambió su vida pues en el terreno laboral le comenzó a ir mejor, ganando minutos y el campeonato en Cruz Azul, llamados a la Selección Mexicana y su llegada al balompié del Viejo Continente.
“Totalmente (cambió su vida), toda la gloria a Dios. Sé que estoy en sus manos, sé que estoy en buen camino y eso te ayuda mucho tanto en los momentos buenos, como en los malos. Me ha ayudado a enfocarme en lo que más me gusta que es el futbol y en mi propósito”, señaló Giménez.
“Para mí es un antes y un después, es un nuevo nacimiento porque tener a Jesús en mi corazón me ha hecho ver la vida de otra manera. Me ha hecho amar al prójimo de una manera inexplicable, porque al final no son tanto las palabras las que te hacen seguir a Jesús sino las acciones”.
Santiago Giménez se convirtió en noticia en días pasados, pues el Tata aseguró que uno de los puntos para no llevarlo a la Copa del Mundo, es que no tenía muchos minutos con el Feyenoord. Esa justificación ocasionó que le llovieran críticas al entrenador nacional, quien se decidió por Rogelio Funes Mori, Henry Martín y Raúl Jiménez para liderar la ofensiva del cuadro mexicano.