El Presidente de México Andrés Manuel López Obrador, encontró la forma creativa de hacer campaña para sus candidatos rumbo al 2024, “yo soy el destapador” dijo en una mañanera el año pasado y los que aspiran son las “corcholatas”.
Hoy, de todas esas corcholatas mencionadas solo quedan cuatro con posibilidades reales, una mujer y tres hombres: Claudia Sheinbaum Pardo, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard Casaubón, Secretario de Relaciones Exteriores; Adán Augusto López Hernández, Secretario de Gobernación y Ricardo Monreal Ávila, presidente del Senado de la República.
¿Pero qué efecto tiene la sucesión presidencial en Quintana Roo? Mucha. A penas acabamos de salir del proceso electoral para la gubernatura, donde la unidad pudo hacer posible que inicie la Cuarta Transformación en la Entidad y las cuatro corcholatas llegaron para apoyar a la ahora gobernadora electa; y donde el Secretario de Gobernación tuvo que ver en la negociación para dicha unidad, los morenistas evidentemente ahora trabajarán para cada uno de esos grupos.
Luego entonces, tendremos dentro de Morena a cuatro corrientes: los “claudistas”, los del “carnal Marcelo”, los “lopistas” y los “monrealistas”; lógicamente, hay que aclarar que estos últimos serán los disidentes dentro del Movimiento, o sea “el patito feo”.
Así que las candidaturas a diputados federales, senadores, presidentes municipales y diputados locales, tendrá que ver con la influencia que tengan cada uno de estos grupos en Quintana Roo, que de lograr nuevamente la unidad, pues tendremos un “surtido rico” en dichas candidaturas.
Por lo pronto, viene la renovación de la dirigencia estatal de Morena, pues antes del 3 de septiembre próximo, Humberto Aldana Navarro, tendrá que dejar de cumplir con esa función, ya que tomará protesta como integrante de la XVII Legislatura y posiblemente como coordinador de la fracción parlamentaria su partido. Ahí se las dejo…
SASCAB
Los delitos no dan tregua a las y los quintanarroenses, porque según el Semáforo Delictivo de mayo, en Quintana Roo se dieron 51 homicidios, 4 extorsiones, 157 actos de narcomenudeo, 205 robo a vehículos, 166 robos a casa habitación, 135 robos a negocios, 309 denuncias por lesiones, 67 violaciones, 582 eventos de violencia familiar y 1 feminicidio.
Sin embargo, parece que a nadie le importa, el Gobierno presume que pese a estos actos delictivos, el turismo sigue creciendo. ¿Usted qué opina?