Cancún, el jardín del Edén, donde florece el árbol de la fruta más preciada, deseada y que da todos los placeres. El botín político qué se entiende como el enriquecimiento de algunos políticos que creen tener derecho por el puro merito de haber invertido en el, algunos otros con el ánimo de recuperar parte de lo que gastó en campaña.
Estas dos palabras es lo que ha sumido al paradisiaco Cancún en el sinónimo de una triste realidad, bajo el desarrollo de administraciones municipales corruptas y calles donde habita la violencia. Con una sociedad que en su mayoría poco o nada le importan los procesos electorales se ha hecho la bolsa predilecta del enriquecimiento desmedido de muchos de sus representantes sociales.
Cuando a la vista está el proceso electoral se acogen fórmulas desesperadas a la búsqueda de candidatos improvisados que den soluciones distintas a aquellas que han ofrecido los partidos políticos tradicionales, los cuales cada periodo han defraudado en la disputa del botín político de gobernar.
Sabemos que los procesos siguen y tienen que seguir su curso como lo marca la ley aun con pandemia y crisis sanitaria y como tal, ya empezaron a asomar la cabeza los primeros interesados; los niños del Verde Ecologista dispuestos a ser de nuevo los protagonistas de la fiesta con un partido de Regeneración Nacional sometido y dispuesto a compartir el suculento manjar.
Las agitadas aguas político-electorales se seguirán moviendo para la joya de la corona, Cancún, donde la pandemia ha dormido a otros temas como la delincuencia y la necesidad social pero que en tiempos de agitación revivirán.
Cancún se ha convertido en un negocio que ha funcionado más como empresa que como el paraíso y la ciudad prometida. Se le acerca la graduación electoral al patrimonio y botín de intereses
EN EL OJO DEL HURACÁN.
Esta es la primera vez que el presidente de México, abandona el país desde que asumió el cargo en 2016. En medio de preguntas del ¿por qué ahora y por qué a Trump? Surgen comentarios del porque si hubo avión disponible para Evo Morales o los restos de José José y no para que López Obrador se traslade.
Todas estas situaciones tienen la respuesta de crear simulación, ambos lideres son similares en el culto a la personalidad. La visita a la Casa Blanca es prácticamente un acto de campaña para ambos mandatarios. El Presidente Trump se gana algunos bonos con la comunidad latina y López Obrador hace como que se impone ante el imperio Yankee.
Lo cierto es que ambos gobernantes buscan librar alguna batalla después de las muchas perdidas con la pandemia, ambos países han sido cuestionados por el número de victimas por COVID-19 y la propagación del mismo, siendo los dos “líderes demasiados tibios y confiados” en la prevención.
Para dos hombres que sus índices de aprobación esta en caída, la reunión se presta para distraer el tema y acaparar la atención sobre algo distinto a los enfermos y muertos de coronavirus haciendo parecer que están logrando un excelente trato.
LO QUE LAS COPETUDAS CUENTAN.
Mucha polémica ha causado los cambios que están aconteciéndose en el Gobierno de Quintana Roo. En plena contingencia y suspensión de labores burocráticas se dio primero el enroque en Comunicación Social, donde el primer encuentro con medios tuvo algunas discrepancias y confusiones.
Ahora se publica en el Diario Oficial del Estado la desaparición de la Oficialía Mayor y las inquietudes surgen al mencionar que esta disposición depende de la aprobación del Congreso del Estado. Aun se está por saber como será la funcionalidad de muchas áreas, como se ubicará el personal a su regreso y lo más importante el manejo de los recursos. COMO DIJERA LA TIA JOVITA “ jarrito nuevo ¿dónde te pondré?.
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