Llevamos un tiempo hablando del final de Cortana, una realidad que Microsoft está poniendo en práctica de una manera bastante cautelosa y tranquila. Esto tiene una explicación, y es que el gigante de Redmond ha optado por mantenerla de forma limita al sector profesional, es decir, ha emprendido una transición que llevará a Cortana a convertirse en una asistente centrada y limitada a la productividad.
Esto tiene una consecuencia importante, y es que poco a poco hemos ido viendo una transición que apunta a una desaparición gradual de Cortana tanto en las aplicaciones que estaban disponibles en diferentes sistemas operativos, incluidos Android y iOS, como en aquellos casos en los que se utilizaban habilidades que habían sido desarrollados por terceros para potenciar las posibilidades de dicha asistente.
Ya tenemos fechas concretas, y una nueva ronda de información que nos ayuda a entender un poco mejor qué es lo que quiere hacer exactamente Microsoft con Cortana. A partir del 7 de septiembre dicha asistente dejará de ser compatible con esas habilidades y funciones desarrolladas por terceros, en 2021 desaparecerán las aplicaciones para iOS y Android, que todavía están disponibles en algunos mercados, y Cortana pasará a estar centrada en tareas relacionadas con la productividad.
Esto apunta, como habréis podido imaginar, a una integración de Cortana en aplicaciones como Outlook y Microsoft Teams, entre otras. El final del soporte de Cortana en dispositivos otros dispositivos, como el Harman Kardon Invoke y los Surface Headphones, se hará realidad en enero de 2021. Para compensar a los usuarios de dicho altavoz inteligente Microsoft tiene pensado ofrecer un cheque regalo por valor de 50 dólares, y también ofrecerá un cheque regalo a los usuarios de los Surface Headphones y Surface Earbuds, aunque limitada a 25 dólares.
Cortana vira al sector profesional, ¿pero por qué?
La explicación es bastante sencilla. El gigante de Redmond hizo una apuesta muy ambiciosa con Cortana, pero al final no terminó de estar a la altura, y no llegó a generar el mismo interés que otros asistentes de primer nivel. En este sentido creo que debemos ser justos con Microsoft, y tener en cuenta que su salida del sector smartphone afectó de forma notable a los planes originales que tenían con dicha asistente.
Microsoft tuvo que improvisar y que adaptar sobre la marcha los planes que tenía originalmente para Cortana. Sus esfuerzos acabaron cayendo en saco roto, y al final la compañía que dirige Satya Nadella ha llegado a la conclusión de que posicionarla como asistente especializada en la productividad es la mejor salida que le pueden dar.
Con este movimiento por parte de Microsoft Cortana deja de ser un rival directo de otros asistentes como Siri, de Apple, o Alexa, de Amazon. Parece que Microsoft no ha terminado de encontrar el espacio de su conocida asistente, que ha estado integrada en multitud de productos y servicios de la compañía, pero que al final ha acabado siendo retirada de una forma bastante discreta. Recordad que incluso Xbox One tuvo integrada a Cortana, y que al final desapareció con una actualización que cambió considerablemente la interfaz.
El futuro de Cortana está perfectamente definido. Su final en el mercado de consumo general está marcado y concretado, pero seguirá estando «viva» en el sector profesional, gracias a su integración en el conjunto de aplicaciones y de soluciones que dan forma a Microsoft 365.