Sed, hambre, frío, desprecio… ‘Hope’ vivía una pesadilla a inicios de enero. Nigeria se había convertido en un infierno para este pequeño que había sido abandonado por sus padres, quienes lo creían un brujo.
Al desamparo estaba cuando se presentó en su camino a Anja Ringgren Loven, fundadora de la ONG African Children´s Aid Education and Development Foundation, quien le brindó asistencia.
Lo trasladó a un hospital, donde, lo primero que hicieron fue desparasitarlo y recibir transfusiones diarias mientras le daban una dieta especial para recuperar su salud, de acuerdo a lo señalado en el Daily Mail británico.
Ante la precaria situación del pequeño, Anja Ringgren Loven solicitó apoyo a través de redes sociales, dos días después de hacerlo, recibió donativos que alcanzaron el millón de dólares, con lo que no sólo se dio asistencia a ‘Hope’, además se construye una clínica.