El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, señaló que el problema de tráfico de drogas no puede seguir igual, como sociedad no se puede aceptar lo que ocurre.
Landa estuvo el pasado jueves en la Reunión Binacional de la Planeación y Seguridad Fronteriza México-Estados Unidos, en la que compartió la anécdota de una familia en Washington, cuyo hijo de 16 años murió a consecuencia de una sobredosis de droga.
“Es un problema importantísimo. Yo sé que eso también pasa en México; leo los titulares de los diarios aquí en México sobre algunas de las cosas atroces que están pasando y no podemos continuar [de este modo].
“Como sociedad no podemos aceptar lo que está pasando, por eso estamos aquí, no estamos aquí para hablar nada más, estamos aquí para dar resultados”, mencionó el diplomático estadounidense.
Landau consideró deprimente revisar archivos históricos de hace 10 años, en los que quedó consigna de reuniones entre México y Estados Unidos sobre el tema de tráfico de armas, por ejemplo.
“Y no sé qué habría pasado entonces, pero es algo urgente y para mí es una pasión ver cómo podemos cooperar, no solamente en reuniones y en visitas, pero en acciones concretas”, mencionó.
Ninguno de los países, añadió, está seguro cuando el otro no lo está, la frontera es el espacio común en donde más intensa debe ser la cooperación. El representante puntualizó que la seguridad es un desafío compartido y una responsabilidad entre ambas naciones. Sin la seguridad difícilmente puede haber crecimiento y prosperidad, más aun cuando las economías se encuentran entrelazadas y México es el principal socio comercial en bienes de Estados Unidos.
Landau expuso que uno de los puntos clave en los que los dos países se tienen que concentrar es en el combate al tráfico de armas y efectivo, y para lo cual “hay que trabajar en estrecha colaboración”.
“Encuentro poco productivo que nos señalemos los unos a los otros sobre de quién es la culpa por las drogas que van al norte o por las armas y dinero que vienen hacia el sur, porque por muchos años los grupos criminales han aprovechado nuestros desacuerdos históricos al respecto”, apuntó.
Landau celebró que en la actualidad exista diálogo del más alto nivel entre México y Estados Unidos, que se demuestra con la última comunicación que hubo entre los presidentes Andrés Manuel López Obrador y Donald Trump.
Hay muchas reuniones entre autoridades de los dos países, agregó, pero lo importante es que haya resultados. “Y en eso estamos enfocados también, que haya operaciones y que no solamente haya palabras, porque esto no puede seguir así para ninguno de los países”.
No se puede aceptar, puntualizó, el nivel de inseguridad en ambas naciones.
En un comunicado difundido ayer por la embajada de Estados Unidos en México, se indicó que el embajador estadounidense considera que la reunión con las contrapartes mexicanas de seguridad resultó altamente productiva, porque se logró continuar con el desarrollo de iniciativas binacionales concretas, que fortalecerán los esfuerzos contra el narcotráfico, la migración ilegal y el tráfico ilegal de armas y dinero en efectivo.