Un ataque de locura, con una expulsión injustificable, por parte de Gareth Bale, empujó al Real Madrid a la segunda posición de la Liga española, después de 16 jornadas como líder, tras empatar 3-3 ante Las Palmas.
Salvó un punto en los últimos minutos, con el doblete de Cristiano Ronaldo, que dejó a Las Palmas sin su primer triunfo en el estadio Santiago Bernabéu, tras una actuación sobrada de clase y liderada por un gran Jesé Rodríguez, quien regresó a la que fue su casa y de la que se fue ante las pocas oportunidades que tuvo.
La expulsión de Gareth Bale, al inicio del segundo tiempo, desabrigó definitivamente al Real Madrid y resultó determinante. Peleó hasta el final el conjunto madridista, que perdió el liderato, pero también la última gota de sudor, en busca de un imposible.
Real Madrid afrontó el choque presionado otra vez por el acoso del Barcelona, hasta entonces su más cercano perseguidor y que había solventado con tranquilidad y sosiego su compromiso ante el Sporting de Gijón. No cabía margen de error en el conjunto que dirige Zinedine Zidane, quien no obstante tiró de rotaciones.
Y eso que tuvo ventaja muy pronto, con el gol de Isco Alarcón, al minuto 8. A continuación empató Tana, dos minutos después. Y el cuadro que dirige Quique Setién se sintió cada vez más cómodo. Tras la expulsión de Bale, un penalti de Sergio Ramos llevó al gol de Jonathan Viera, al 56’; y a continuación, el de Kevin Prince Boateng, al 59’.
Tiró de épica en busca de un imposible, como en ocasiones anteriores. Se quedó a medio camino, pero al menos evitó la derrota, gracias a dos goles de Cristiano Ronaldo, al minuto 86 y 89, en un final frenético.
En la pelea por disputar la Europa League de la próxima temporada, el Villarreal, con una destacada actuación de Jonathan dos Santos a lo largo del encuentro, dio un paso al frente. A pesar de jugar en El Sadar con bajas importantes, se llevó de Pamplona un triunfo facilón, con marcador de 4-1, al aprovechar la debilidad defensiva incurable de un Osasuna, último en la clasificación y que se acerca de forma irremediable al descenso.
Los goles de Roberto Soriano (2’) y Roberto Soldado (27’), dedicados a Sergio Asenjo, lesionado de gravedad ante el Real Madrid, sentenciaron el partido.
Un gol de penalti convertido por Roberto Torres metió en el partido a Osasuna de forma engañosa en la segunda parte (64’), ya que el Villarreal ató los tres puntos con dos goles de Santos Borré (74’ y 78’).
El Celta de Vigo, por su parte, perdió terreno en sus aspiraciones, tras ceder el empate a dos tantos frente al Espanyol, que de igual forma contó con el mexicano Diego Reyes durante los 90 minutos.
Iago Aspas adelantó al Celta (21’) y Gerard Moreno empató (28’). Daniel Wass volvió a poner por delante a los celestes (30’) y Pablo Piatti volvió a empatar (32’). Al borde del descanso, la expulsión de Andrés Fontás limitó el panorama vigués.
El Granada, sin embargo, dio un paso adelante hacia la salvación. Con el mexicano Guillermo Ochoa en la portería, sumó su tercera victoria en los cinco últimos partidos. Le ganó 2-1 al Alavés, que terminó con nueve jugadores, por la expulsión Aleksandar Katai y Alexis, con el partido ya definido.
Wakaso Mubarak (38’) e Isaac Cuenca (53’) facilitaron la ventaja del conjunto andaluz. Después reaccionó el Alavés con el tanto de Víctor Camarasa (57’). El triunfo sitúa al Granada con los mismos puntos que el Deportivo La Coruña, que marca la salvación, y que tiene dos partidos menos disputados.