En los últimos meses ha aumentado el interés legislativo para mejorar el período vacacional al que tienen derecho las personas trabajadoras en México, una prestación que no se ha modificado en 50 años de vigencia de la LFT. La Coparmex manifestó su apoyo a una reforma en este sentido.
“Es necesaria la reforma”, afirmó Ricardo Barbosa, presidente de la Comisión Laboral de Coparmex, quien aseguró que el sector patronal respaldará las modificaciones legales a la Ley Federal del Trabajo (LFT) para aumentar el mínimo de días de vacaciones al que tiene derecho la fuerza laboral en el país.
Desde la óptica del representante de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), a pesar de que el 60% de los empleadores formales otorga prestaciones superiores a las de ley, incluyendo más días de vacaciones, la otra cara de la moneda es que “la Ley Federal del Trabajo se ha quedado atrasada en el tema de las vacaciones. Estamos de acuerdo, acudiremos al parlamento abierto en el Senado apoyando la moción de que se aumenten las vacaciones”, dijo en entrevista.
En los 50 años de vigencia de la LFT, el esquema de días de vacaciones nunca ha sido reformado y el piso mínimo al que tienen derecho las personas trabajadoras en su primer año de trabajo, ubica a México como uno de los países que ofrece los periodos vacacionales más cortos a su fuerza laboral.
“Quizá en algunas industrias o sectores los contratos colectivos han ganado hasta más días de vacaciones, pero en la Ley Federal del Trabajo sólo se contemplan seis. Es impresionante como México es de los países que menos vacaciones tienen”, apuntó Patricia Mercado, senadora de Movimiento Ciudadano y promovente de una de las iniciativas de reforma para incrementar los días de vacaciones.
En el último año, ha crecido el interés legislativo por reformar la LFT para ampliar el periodo vacacional mínimo y la Cámara Alta suma tres iniciativas —dos de ellas presentadas en los últimos seis meses— para mejorar esta prestación laboral. Las diversas propuestas han dado pauta a la organización de un Parlamento Abierto en el Senado para discutir con la iniciativa privada (IP), sindicatos, especialistas y trabajadores cuánto es lo justo y posible para avanzar en el tema.
El resultado de este ejercicio, explicó Patricia Mercado, será un dictamen que se construirá retomando todas las ideas expuestas, un proyecto con altas probabilidades de que se vote este año en la Comisión de Trabajo del Senado, pues hay consenso entre los legisladores de la importancia de reformar el marco regulatorio.
“Estamos convencidos que a las empresas les conviene tener trabajadores y trabajadoras más contentas y más conectadas con sus empresas. Por supuesto que desconectarte dos semanas —porque eso serían los 12 días— es realmente un beneficio para la salud mental”, señaló la legisladora, secretaria de la Comisión de Trabajo de la Cámara Alta.
Apoyo patronal, pero con transición
Aunque el sector patronal respalda la reforma para duplicar el piso mínimo de vacaciones en la LFT, Ricardo Barbosa adelantó que solicitarán un periodo de transición bien definido y que los cambios entren en vigor a partir de enero de 2023, esto para evitar un impacto en las finanzas de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).
“Lo vemos con buenos ojos, pero queremos dialogar que este aumento sea progresivo. Es decir, que en el primer año de transición, en vez de subir de seis a doce días, que sean nueve días. Ya en el segundo año, que sean doce días. Lo vemos bien, hay algunas cosas que debemos dialogar y otras acotar, pero estamos a favor de que la Ley se actualice a la realidad de la mayoría de los empleadores formales del país”, puntualizó.
Desde la perspectiva del representante de la Coparmex, sería imposible que la reforma cuente con el consenso de la iniciativa privada sin establecer un periodo de transición para no generar tanta confusión.
Por su parte, Patricia Mercado consideró que el éxito de la reforma en el pleno del Senado dependerá del respaldo u oposición que pueda encontrarse, pero el objetivo del Parlamento Abierto es construir un proyecto por consenso, que evite un freno del dictamen.
“Si hay un consenso es posible que se suba al pleno. El Senado necesita también tener reformas trascendentes en acuerdo, porque todo está muy polarizado y las reformas se quedan debajo de la mesa y finalmente no salen. Éste puede ser un dictamen noble que salga en esta legislatura y este Senado, que le hemos puesto interés a los derechos laborales. Si hay oposición, seguramente lo votaremos en comisiones, pero a lo mejor no se vota en el pleno hasta septiembre. Están las dos posibilidades, el Parlamento Abierto nos dirá mucho de qué tanto acuerdo hay”, explicó la senadora.
En ese sentido, Patricia Mercado subrayó que la discusión es impostergable y alineará el marco regulatorio a la nueva realidad del mercado laboral, en el cual las nuevas generaciones priorizan más la salud mental por encima de la remuneración y buscan entornos favorables para conciliar la vida laboral con la personal.
“Es un tema que necesitamos actualizar en nuestra ley, aunque la gran mayoría de los empresarios otorga más vacaciones desde un inicio, pero totalmente para adelante. El tema es que tenemos que encontrar canales de comunicación para mejorar la calidad de vida de nuestros trabajadores, no sólo en las vacaciones, ese es sólo un punto donde tenemos una corresponsabilidad tanto el gobierno, la sociedad y los empleadores”, expresó Ricardo Barbosa.
Además del incremento en los días de vacaciones, el integrante de Coparmex aseguró que hay pendientes como el tema de los tiempos de traslados de los trabajadores a los centros de trabajo, la atención digna en los servicios de seguridad social, el acceso a viviendas dignas y créditos hipotecarios más económicos y pensiones decentes. “Este es un punto de muchas cosas que traemos en la agenda”.
Patricia Mercado, aseguró que la mejoría del esquema de vacaciones en la LFT representa un ganar-ganar paras las empresas y trabajadores y, a largo plazo, mayores beneficios para los empleadores al reducir la rotación y el agotamiento. “El mundo laboral y de derechos tiene que cambiar, porque cambiamos. No se puede pensar que después de la pandemia no pasó nada”.