CIUDAD DE MÉXICO.- En el malecón Tajamar Cancún no hay indicios “ni de ecocidio y menos de devastación”, afirmó el titular de la Procuraduría Federal del Medio Ambiente (Profepa), Guillermo Haro.
Precisó que como resultado preliminar de una serie de trabajos de gabinete y campo realizados al proyecto Malecón Tajamar Cancún, “no hay indicios de la existencia de daños ni responsabilidad ambiental atribuible al Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur)”.
En conferencia de prensa, Haro concluyó que el desmonte del pasado 16 de enero se ejecutó al amparo de autorizaciones válidas vigentes otorgadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para desarrollarse en un predio que no está considerado como área natural protegida.
Sin embargo, el funcionario dijo que sí hay indicios de un daño ambiental cuya responsabilidad recae en la empresa Bi & Di Real State de México S.A. de C.V., por realizar acciones de desmonte de vegetación forestal sin contar con autorizaciones en materia de impacto ambiental y cambio de uso de suelo en terrenos forestales, ni con Estudio Técnico Justificativo, ni con proyectos ejecutivos validados por la Semarnat.
Para la construcción de los proyectos en los diversos lotes del predio, agregó el funcionario, se deberán obtener nuevas autorizaciones de la Semarnat, al amparo de la legislación hoy vigente y en congruencia con las demás disposiciones estatales y municipales.
Dijo que han realizado inspecciones permanentes al proyecto y continúa profundizando en la revisión de los términos y condicionantes de las autorizaciones otorgadas por la Semarnat al proyecto Malecón Tajamar Cancún.
Sin embargo, se precisa que las acciones de chapeo y desmonte realizadas por Fonatur se hicieron con base en los protocolos correspondientes.
Dijo que ordenarán a Fonatur para que concluya el programa de rescate de la fauna silvestre observada en la inspección efectuada el pasado 26 de enero.
Asimismo, continuará con los procedimientos para determinar la responsabilidad ambiental y administrativa de la empresa Bi & Di Real State de México S.A. de C.V.
A la fecha, aseguró, no hay indicios de la existencia de daños ni responsabilidad ambiental atribuible a Fonatur, como resultado de la remoción de mangle en el Malecón Tajamar Cancún.
El funcionario insistió que hasta el momento no se puede considerar tampoco la situación como un ecocidio, porque los desarrolladores cuentan con todos los permisos correspondientes.
“Desde el 2005, la propia Semarnat determinó que el predio del Malecón Tajamar no contaba con las características y funcionalidades que lo pudieran clasificar como humedal, tal y como lo describe la Norma Oficial Mexicana 022 Semarnat”.
El procurador Guillermo Haro señaló que se está investigando que los desarrolladores turísticos no continúen dañando el entorno ecológico, pero también hizo una aclaración, al indicar que los permisos se vencen el próximo 7 de febrero, y es a partir de esa fecha cuando la Secretaría del Medio Ambiente y la Profepa van a intervenir, para exigirles que cumplan con la norma ecológica, o de lo contrario el desarrollo será clausurado en su totalidad.