Fue inducida por los agentes de la Policía Fiscal del SAT a tomar la cocaína líquida porque ella alegaba que no era droga, según afirmaron ayer algunas versiones de quienes vieron aún con vida a Alejandra Jazmín Prado Aguilar en el Aeropuerto Internacional de Cancún.
Fuentes cercanas al caso indicaron que vieron con vida a la pasajera luego de cruzar sin problemas el punto de revisión del Instituto Nacional de Migración (INM) y cuando procedió a recoger su equipaje en la Aduana de Cancún con base en el aeropuerto fue cuando tuvo problemas con los agentes de la Policía Fiscal del Servicio de Administración Tributaria (SAT), e incluso existen fotografías previas de ella antes de sufrir el infarto.
Se averiguó que Alejandra Jazmín Prado Aguilar le aseguraba a los policías fiscales que no era droga, y en respuesta le exigieron que si no era droga entonces que se lo tome, y entonces ella tuvo acceso a la cocaína líquida y procedió a ingerirla posiblemente presionada por tratar de encontrar una salvación ante la desesperación del momento.
También se planteó que los elementos del SAT no aplicaron el protocolo de aseguramiento de la persona y del propio enervante, tal como procede en un caso de detección de la droga, pues ella tuvo la facilidad de tener en su posesión la cocaína líquida e ingerirla sin ningún impedimento.
Y también se tiene conocimiento de que en el Aeropuerto Internacional de Cancún el Servicio de Administración Tributaria y la Aduana de Cancún tienen sus propias cámaras de videovigilancia y en este sistema debe haber evidencia de qué fue lo que realmente ocurrió, sin embargo, tiene un tiempo establecido para ser borrado como evidencia.
Prado Aguilar se encontraba en buen estado de salud antes de ingerir la droga, y una vez que tomó el líquido fue llamado de emergencia el servicio médico del aeropuerto porque ella empezó a sentirse mal y fue entonces cuando se procedió a trasladarla en el Hospital General de Cancún y se confirmó el deceso.
En el Aeropuerto Internacional de Cancún operan con toda opacidad y a veces con impunidad dependencias como el SAT, la Aduana de Cancún y el Instituto Nacional de Migración, y de hecho no permiten el acceso a los medios de comunicación ni la toma de fotografías por la corrupción que predomina en esos lugares.
Alejandra Jazmín Prado Aguilar, tenía 37 años de edad, era originaria del Distrito Federal, y arribó a Cancún el pasado miércoles 12 de agosto, alrededor de las 13:00 horas en el vuelo 325G de Copa Airlines, procedente de Panamá.