La Real superaba en intensidad a los de Simeone y también pudo hacerlo en el luminoso de no ser porque el colegia vio un ‘piscinazo’ en el área de Vela cuando en realidad Godín tocó la pierna del delantero mexicano.

La Real se quedaba sin la pena máxima y Vela era amonestado. Parecía que los de Simeone se reponían tras el arreón realista pero todo fue un espejismo. Los locales obligaban a los rojiblancos a jugar lejos de meta de Zubikarai y ello conllevaba más peligro sobre la meta de Moyá. El peligro caía del lado realista, sin embargo la ocasión más clara de los locales llegó tras un error garrafal de Miranda. El brasileño cedió sin mirar el balón para Godín sin ver que por allí estaba Agirretxe. El ‘9’ de la Real regateó a Moyá y con toda la portería para él, su remate lo acabó sacando como una exhalación Godín bajo palos.

El Atlético se veía supera por la mayor intensidad de los donostiarras y no encontraba la forma de recomponerse. La mejor noticia para los de Simeone fue el pitido que señalaba el descanso. La segunda mitad corroboró las malas sensaciones de los rojiblancos cuando a los cinco minutos se quedaba con un hombre menos por doble amarilla de Siqueira.

El brasileño cometió un error infantil al lanzarse tarde al suelo tras ver la primera amarilla tres minutos antes y se ganó el camino de los vestuarios. También sirvió para comprobar que tampoco era el día de Álvarez Izquierdo, que se volvió a tragar un segundo penalti sobre Vela. En esta ocasión fue Mandzukic quien llegó pasado de revoluciones y golpeo con el hombro en la boca del mexicano ocasionándole una herida. Pintaban bastos para los de Simeone que tenía que enfrentarse a mas de treinta minutos con un jugador menos.

La situación podría haber dado un vuelco si Mandzukic no llega a perdonar una clarísima ocasión. La internada por la izquierda de Ansaldi, que había salido para ocupar el sitio dejado por Siqueira, la dejada atrás para el croata que la manda fuera con todo a su favor. Perdonaba el Atlético un oportunidad de oro, que intentaba capear el temporal como podía.

La Real perdía algo de intensidad y eso favorecía a los rojiblancos, pero todavía quedaba mucho por jugar. El dominio era claramente realista pero no terminaban de llegar con claro peligro a los dominios de Moyá. Resístia con uñas y diente el Atlético ante el empuje de la Real pero poco pudieron hacer los rojiblancos cuando en el 82′ Agirretxe cabeceaba a la red un centro desde la izquierda de Zaldúa, para el 2-1.

El ‘9’ realista hacia justicia a tenor de los visto sobre el terreno de juego. En la recta final Simeone intentó pescar un punto dando entrada al ‘Cebolla’ Rodríguez y a Griezmann, abucheado en su vuelta, pero ya era demasiado tarde. La Real toma oxígeno a la espera de su nuevo entrenador y el Atlético se aleja de la cabeza de la Liga.