CHETUMAL, 25 de octubre.— El fiscal general de Quintana Roo, Raciel López Salazar, compareció ante el pleno de la XVII Legislatura en una sesión que se prolongó hasta altas horas de la madrugada para rendir su informe de labores a cuatro meses de asumir el cargo.
Durante su presentación, López Salazar planteó un panorama de una fiscalía en proceso de refundación y reestructuración con el objetivo de darle funcionalidad y eficiencia.
El fiscal destacó la importancia de fortalecer las capacidades del Ministerio Público y la implementación de herramientas tecnológicas para combatir la delincuencia. En este sentido, resaltó la necesidad de equipar a la fiscalía con mejores instrumentos tecnológicos de inteligencia y contra inteligencia, ya que la delincuencia cuenta con recursos tecnológicos avanzados.
López Salazar enfatizó que no puede lograr estos cambios de manera individual y que necesita el acompañamiento de todas las autoridades. Hizo hincapié en la importancia de contar con policías municipales comprometidos y enfocados en su labor.
El fiscal también abordó el tema de la fiscalía de secuestros, señalando que operaba en condiciones precarias con una oficina habilitada en dos celdas, a pesar de existir un modelo nacional de unidad antisecuestro. Expresó su preocupación por el estado de las instalaciones y el acinamiento de personas en la actualidad.
En cuanto al manejo de recursos, López Salazar cuestionó el destino de los fondos en administraciones pasadas y la necesidad de revisar los contratos. Señaló que recibió un rezago de 334,000 expedientes, incluyendo averiguaciones correspondientes al sistema tradicional.
El fiscal compartió detalles sobre el presupuesto de la fiscalía, destacando que el 75% se destinaba a nómina, el 13% a servicios de viáticos y traslados, un 11% al capítulo 5,000 y solo un 1% en gasto operativo. Explicó que con este presupuesto no se podía operar eficientemente y que el 60% del presupuesto se había ejercido antes de su llegada.
Raciel López Salazar también mencionó los esfuerzos de la fiscalía para combatir diversos grupos delictivos en la región.
Afirmó que están trabajando para reducir los índices delictivos en los cuatro municipios que concentran el 87% de los hechos delictivos, siendo Cancún el más afectado con el 51% de los casos.
El fiscal finalizó su comparecencia resaltando la importancia de continuar combatiendo la delincuencia, incluyendo el crimen de cuello blanco, y expresó su compromiso de seguir trabajando por la seguridad y justicia en Quintana Roo.