¿LeBron James o Michael Jordan? ¿Bill Russell o Wilt Chamberlain? ¿Stephen Curry o Kevin Durant? ¿La vieja escuela o la nueva camada?
Estos debates encienden sin cesar los ánimos en todos los rincones donde existen aficionados de la NBA. Nuestros expertos han hecho sus mejores esfuerzos para definirlos, clasificando a los jugadores más grandes en los 74 años de historia de la liga.
Ser mencionado en la conversación para definir al mejor jugador de todos los tiempos en la NBA significa formar parte de un club exclusivo. Lo decimos sin intención de faltar el respeto a aquellos que quedaron a poco de ingresar a nuestro Top 10. La lista que comprende entre los números 10 y 1 sirve de coronación a los atletas excepcionales que cuentan con argumentos para ser considerado como el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos.
10. Shaquille O’Neal
1992-96 Orlando Magic; 1996-2004 Los Angeles Lakers; 2004-08 Miami Heat; 2008-09 Phoenix Suns; 2009-10 Cleveland Cavaliers; 2010-11 Boston Celtics
23.7 PPJ, 10.9 RPJ, 2.3 BPJ
El pívot miembro del Salón de la Fama transformó el panorama del baloncesto, gracias a una combinación de agilidad, explosividad y contextura física sin precedentes en la NBA. O’Neal, campeón de la liga en cuatro ocasiones y tres veces ganador del Más Valioso de las Finales, sumó promedios de 23.7 puntos y 10.9 rebotes en el transcurso de una carrera que prácticamente abarcó dos décadas. O’Neal fue All-Star en 15 oportunidades y alzó el reconocimiento al Más Valioso de la liga en la campaña 1999-2000. El gigante amante de la diversión aprovechó su carismática personalidad para convertirse en comentarista e imagen de diversos productos alrededor del mundo tras su retiro de la actividad del baloncesto.
— Nick Friedell
9. Kobe Bryant
1996-2016 Los Angeles Lakers
25.0 PPJ, 5.2 RPJ, 4.7 APJ, 1.4 robos PJ, 1.4 3s PJ
Más allá de sus logros estadísticos (cinco campeonatos, el partido con 81 puntos, el último encuentro de su carrera en el cual sumó 60 tantos, el premio al Más Valioso de la NBA en 2008, 20 temporadas disputadas con la misma franquicia), el legado duradero dejado por Bryant fue su mentalidad agresiva y ardiente deseo de dominar en su disciplina deportiva. La “Mentalidad Mamba” se convirtió en algo más que una frase kitsch después del trágico deceso de Bryant. Actualmente, representa una hoja de ruta para perseguir un sueño. Bryant por siempre formará parte de la lista corta de jugadores con quienes se desea contar para intentar esa última cesta que podría definir el destino de un partido.
— Dave McMenamin
8. Tim Duncan
Sam Forencich/NBAE/Getty Images
1997-2016 San Antonio Spurs
19.0 PPJ, 10.8 RPJ, 3.0 APJ, 2.2 BPJ
Es probable que el único aspecto criticable del juego de Duncan es que él era un tipo aburrido. Duncan era conocido como “El Gran Fundamental”, capaz de dominar durante casi dos décadas a ambos lados de la cancha, con una simplicidad digna de ejemplo, evidente en su cesta a rango medio y perfecta posición defensiva. Por encima de todo, Duncan fue uno de los mejores ganadores de la historia de la NBA, liderando a los Spurs hasta alcanzar cinco títulos y 1.001 triunfos en temporada regular, mayor registro histórico de la NBA para cualquier jugador con un mismo equipo.
— Tim MacMahon
7. Larry Bird
1979-92 Boston Celtics
24.3 PPJ, 10.0 RPJ, 6.3 APJ, 1.7 robos PJ
Bird, junto a Magic Johnson, revitalizó a la NBA (y la rivalidad entre Celtics y Lakers) gracias a una combinación increíble de precisión en las cestas, habilidad con los pases e intelecto de baloncesto. Lideró a la franquicia de Boston en la obtención de tres campeonatos y sus tres premios consecutivos al Más Valioso entre 1984 y 1986 representan una hazaña sólo comparable en la historia de la NBA con los méritos de Chamberlain y Russell. Hasta la incursión de LeBron James, el nativo de Indiana era universalmente considerado como el mejor alero de todos los tiempos.
— Tim Bontemps
6. Wilt Chamberlain
1959-62 Philadelphia Warriors, 1962-65 San Francisco Warriors; 1965-68 Philadelphia 76ers; 1968-73 Los Angeles Lakers
30.1 PPJ, 22.9 RPJ, 4.4 APJ
Chamberlain fue un atleta con un talento tan superior que rayaba en lo cómico. Fue un jugador que verdaderamente se adelantó a su era con creces. Sus estadísticas (incluyendo su récord de la NBA de 100 puntos anotados en un mismo partido y su promedio de 50 tantos por encuentro en una sola temporada) son míticas. La única razón por la cual “The Big Dipper” no se ubica en un puesto más alto en los rankings de los jugadores más grandes de todos los tiempos es que Chamberlain “apenas” ganó dos campeonatos de la NBA.
— Bontemps
5. Magic Johnson
1979-91, 1996 Los Angeles Lakers
19.5 PPJ, 7.2 RPJ, 11.2 APJ, 1.9 robos PJ
Johnson, quien cuenta con argumentos para ser considerado el base y líder sobre la cancha más grande de la historia, revolucionó el mundo del baloncesto, incursionando en la NBA como el base de mayor estatura en la historia de la liga hasta ese entonces, con 6 pies y 9 pulgadas. Fue un ganador legendario, un pasador trascendental, una jugada destacada lograda al instante y constante amenaza de triple-doble. Sin la presencia de Johnson y su histórica rivalidad con Bird y los Boston Celtics, es probable que la NBA no se encontrara en el sitial que hoy ocupa en el panorama deportivo. El carismático Johnson definió a los Lakers de la era “Showtime” y sus quiebres rápidos y pases sin mirar catapultaron a la NBA, de una era en la cual los partidos de las Finales no se transmitían por televisión hasta convertirse en el deporte global que es hoy.
— Ohm Youngmisuk
4. Bill Russell
Russell, quien fue el más grande ganador de la historia del baloncesto, se alzó con 11 títulos en un lapso de 13 años, mientras convertía a los Boston Celtics en una súper potencia defensiva, prácticamente por sí solo. La agudeza de Russell a la defensiva y su determinación lo convirtieron en el antagonista perfecto de Wilt Chamberlain. Russell fue uno de los pocos jugadores de su época que no habría parecido obsoleto en eras futuras. Sus habilidades le ayudaron a obtener cinco premios al Más Valioso y 11 selecciones al equipo All-NBA.
— Bontemps
3. Kareem Abdul-Jabbar
1969-75 Milwaukee Bucks; 1975-89 Los Angeles Lakers
24.6 PPJ, 11.2 RPJ, 3.6 APJ
Ningún jugador en la historia de la NBA puede igualar el largo historial de excelencia alcanzado por Abdul-Jabbar. El pívot ganó la cifra récord de seis premios al Más Valioso de la NBA y fue All-Star en 19 oportunidades, alzando seis campeonatos (con 17 años de distancia entre el primer y último títulos), aparte de 15 selecciones al equipo All-NBA, incluyendo 10 al primer equipo. Su indetenible gancho “skyhook” le permitió anotar más puntos que cualquier otro jugador en la historia de este deporte y si bien su estilo no era ostentoso, se puede decir que no hemos visto a nadie mejor.
— Bontemps
2. LeBron James
2003-10, 2014-18 Cleveland Cavaliers; 2010-14 Miami Heat; 2018-20 Los Angeles Lakers
27.1 PPJ, 7.4 RPJ, 7.4 APJ, 1.6 robos PJ
Con 6 pies y 9 pulgadas de estatura, con un peso superior a las 250 libras y un salto vertical de 40 pies, el juego de James está basado en su poder; no obstante, su peculiar habilidad con los pases podría ser su habilidad más fuerte. James, premiado en cuatro ocasiones como Más Valioso y tres veces campeón, ha reinventado la forma en la cual definimos el apogeo de condiciones físicas de un jugador, siendo capaz, a sus 35 años, de conducir a Los Angeles Lakers para meterse en la lucha por el título, en su temporada número 17 en la NBA. Su bloqueo en el Juego 7 de las Finales de 2016, que ayudó a sellar la remontada 3-1 contra unos Golden State Warriors que sumaron 73 victorias en la campaña regular, resumirá por siempre sus habilidades ultra-atléticas y sed de triunfos.
— McMenamin
1. Michael Jordan
1984-93, 1995-98 Chicago Bulls; 2001-03 Washington Wizards
30.1 PPJ, 6.2 RPJ, 5.3 APJ, 2.3 robos PJ
El jugador más grande de todos los tiempos. Jordan lideró a los Chicago Bulls hasta alcanzar seis campeonatos de la NBA, seis premios al Más Valioso de las Finales, cinco reconocimientos al Más Valioso de la temporada regular, mientras se convertía en todo un ícono mundial, dentro y fuera de la cancha. El genio de Jordan, a ambos lados de la cancha, definió el baloncesto para una generación, imponiéndose como referente de los jugadores del futuro, que intentan seguir sus pasos. Su juego trascendió al deporte.
— Friedell