Hay momentos en que los datos cuentan una historia mayor que cualquier discurso. Y hoy, los datos cuentan que Playa del Carmen vive una etapa distinta, marcada por el trabajo, la cercanía y los resultados. Una etapa encabezada por una mujer que ha decidido transformar la manera de gobernar: Estefanía Mercado.
La encuesta publicada por Rubrum en abril de 2025 no deja espacio a dudas. Entre los municipios más importantes de Quintana Roo, Playa del Carmen destaca en todos los indicadores clave: desempeño del gobierno, servicios públicos, cercanía con la ciudadanía y percepción de seguridad.
En desempeño general, Estefanía Mercado alcanza una calificación de 5.42, la más alta del estado. Este número no es solo una cifra: es el reflejo de una gestión que se ha puesto al servicio de la gente, que escucha, resuelve y camina junto a su comunidad. Playa del Carmen no solo tiene una presidenta municipal; tiene una líder con causa.
En servicios públicos, el municipio también lidera con 5.82, mostrando que la inversión en lo básico —calles limpias, alumbrado, mantenimiento, agua— está dando frutos visibles. No se trata de grandes promesas, sino de respuestas concretas a las necesidades de todos los días.
En la categoría de cercanía, Estefanía vuelve a colocarse en primer lugar con una calificación de 5.20. Y ahí radica una de sus principales fortalezas: es una gobernante que no se encierra, que está en el territorio, en las colonias, en los parques y en las asambleas. Una presidenta que no gobierna desde el escritorio, sino desde el corazón de su pueblo.
Y en percepción de seguridad, un tema tan sensible y urgente, Playa del Carmen se sitúa al frente con 5.08. Esto habla de un esfuerzo sostenido por recuperar la tranquilidad, por profesionalizar a la policía, invertir en tecnología y fortalecer la coordinación institucional. Pero sobre todo, habla de una apuesta clara: construir paz desde las raíces.
Estefanía Mercado ha logrado posicionar a Playa del Carmen como un referente en Quintana Roo. No con marketing, sino con hechos. No con discursos huecos, sino con una política viva, que mira de frente, que entiende que gobernar es servir, y que cuando se sirve con convicción, la gente responde con confianza.
En tiempos de cambio, Playa del Carmen encontró una voz firme, una mano abierta y una ruta clara. Y esa ruta tiene nombre: Estefanía Mercado.