Finanzas, la prioridad

Cuando asumió la gubernatura el 25 de septiembre pasado, Carlos Joaquín González tenía ante sí dos problemas mayúsculos: el desorden financiero heredado e implementar acciones legales en contra de los funcionarios de la anterior administración que habrían incurrido en irregularidades.

Concentrar sus esfuerzos en la persecución legal de los ex funcionarios, con todas sus implicaciones políticas, le habrían representado aplausos, el reconocimiento de quienes buscan más venganza que justicia.

Sin duda, castigar a los responsables del saqueo, evitar que los delitos cometidos queden en la impunidad, era importante y debe seguir siéndolo.

Sin embargo, en el arranque de su administración era una prioridad atender las alicaídas finanzas estatales, pues dejar ese tema en un segundo plano hubiera significado el harakiri para su gobierno, pues el colapso financiero hubiera ocurrido irremediablemente.

Como el Titanic, el barco joaquinista habría chocado contra su iceberg en febrero próximo, según el diagnóstico que se tenía.

Es decir, para emprender la batida contra los corruptos hay tiempo. Largos cinco años por delante, pues además esa guerra implicará prolongadas, desgastantes batallas legales, mientras que la atención de las finanzas tenía plazo fatal.

Priorizar y atender antes que nada el problema financiero representó para el gobierno de Carlos Joaquín obtener el oxígeno que necesita para encarar las otras cosas importantes que debe atender.

Y la manera como reordenó las finanzas en sus primeros 100 días de gobierno le ha valido el reconocimiento de instituciones internacionales, como el Banco Mundial. Incluso recibió felicitaciones desde las altas esferas políticas y financieras del país.

Una vez estabilizadas las finanzas, el gobierno de Carlos Joaquín puede finalmente emprender el despegue para encarar otras prioridades, que no son pocas, entre ellas la aplicación de la justicia a quienes deba castigarse.

Platea

En Veracruz, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares definió como prioridad las acciones legales en contra de su predecesor Javier Duarte Ochoa y relegó a segundo término la reordenación de las finanzas.

A diferencia de Carlos Joaquín, Yunes Linares sólo estará dos años en el cargo, de modo que no tendrá tiempo para resolver el problema financiero que es casi nueve veces más grande que el de Quintana Roo y tiene que ofrecer resultados tangibles casi de manera inmediata para tratar de que el proyecto panista que representa pueda tener continuidad más allá del 2018.

Si el problema financiero de Quintana Roo es gigantesco con la deuda de poco menos de $19,000 millones de pesos, el de Veracruz es monumental, de casi $170,000 millones de pesos.

Luneta

No importa la época que vivamos, el Caribe siempre será tierra de piratas.

Así se demuestra con la pretensión de un grupo de particulares de apropiarse de importante área pública de la zona hotelera, incluyendo el tramo de una ciclopista.

Sin embargo, el sentido de pertenencia que afortunadamente va creciendo en la sociedad también es un freno a esas pretensiones privatizadoras apoyadas desde el gobierno.

Correo: jsilvapalcoquintanarroense@gmail.com

Twitter: @JulioCsarSilva | @PalcoQR

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