Una presunta clínica de rehabilitación que funciona en la región 231 de Cancún opera de manera irregular, sin la licencia municipal de funcionamiento y tampoco con los permisos de salud, por lo cual la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) la clausuró, pero los propietarios del negocio rompieron los sellos.
En el caso de la licencia municipal de funcionamiento, el director de Fiscalización, Raymundo López Martínez, dijo que los propietarios de la clínica “Montecristo” tienen diez días hábiles, es decir, hasta el próximo 25 de mayo, para regularizar su documentación oficial para continuar funcionando.
Indicó que la dependencia a su cargo continua con la revisión de los 36 mil establecimientos registrados en el padrón de negocios en Benito Juárez, a fin de constatar que cumplan debidamente los permisos y documentos correspondientes para funcionar, tal como son: licencia de funcionamiento, constancia de uso de suelo y anuencia de Protección Civil, al igual que estén al corriente con los impuestos que marca la normativa municipal que son pago de predial y de servicio de recolección de basura.
En el caso particular de la clínica “Montecristo”, detalló que en la visita se solicitó la licencia de funcionamiento y ésta no fue presentada, por ello, como marca la normativa correspondiente, se emitió el acta de inspección que permite a los dueños o representantes legales presentarse en la dependencia durante los siguientes 10 días hábiles para regularizar su documentación oficial para continuar funcionando.
Indicó que este sitio fue clausurado días atrás por la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), sin embargo, se rompieron los sellos y nuevamente está operando, ya que en la diligencia se constató que cuenta con al menos 12 personas internadas en el programa de rehabilitación de adicciones que ofrecen, aunque la verificación de las medidas de seguridad e higiene corresponden a dicha dependencia federal.
Refrendó que el Ayuntamiento de Benito Juárez promueve el acercamiento y diálogo con propietarios de todos los negocios registrados, a fin de que actualicen y tramiten sus documentos oficiales antes de ser sancionados, por lo que desde el inicio del año hasta la fecha suman tres mil 500 negocios inspeccionados a quienes se les solicita que presenten los permisos que correspondan y en caso de no tenerlos, se les emite el plazo de prórroga marcado por la ley que es 10 días hábiles y solamente si no acuden con la autoridad, se procede a la clausura temporal y sanciones correspondientes.
Para garantía de transparencia a los contribuyentes, el director de Fiscalización refirió que los 35 inspectores que realizan recorridos diarios por la ciudad, al llegar a los negocios deben acreditarse como servidores públicos con el gafete oficial emitido por el Ayuntamiento, así como explicar el procedimiento de ley para que los propietarios conozcan los pasos a seguir para completar los trámites que requiera su negocio.