Anunciado hace tres días, el módulo especial para la atención de casos de COVID-19, afuera del Hospital General “Jesús Kumate Díaz”, ya lleva un avance del 50% en su construcción.
Trabajadores hoy estaban enfocados en erigir las paredes de este nuevo módulo, así como en la instalación de su piso, sin querer declarar sobre su progreso, al no tener autorización para ello. Como desde el inicio de la contingencia, personal del hospital se niega a hablar con la prensa; sin embargo, a juzgar por el avance de la obra, se ve que están a mitad de camino.
El módulo se construye por donación del Ayuntamiento de Benito Juárez, según lo dio a conocer la presidenta municipal, Mara Lezama, hace unos días, como un área de apoyo para el Hospital, que puede servir como un punto de recepción previa, al de que se pasen a los pacientes a urgencias.
Estas instalaciones “son resistentes a la humedad, no absorben olores, no propagan el fuego y evitan la transmisión de bacterias, entre otras características”, según se informó en un comunicado.
El hospital opera con normalidad, aunque con medidas de prevención. El acceso está restringido a cierto número de pacientes, por lo que muchas familias deben esperar afuera en el calor, a menudo escudándose en la sombra de algún árbol, situación que hace imposible mantener la distancia adecuada.
Además, desde la semana pasada se instaló un túnel de sanitización, por el que deben pasar los pacientes y acompañantes, para ingresar al nosocomio.