Bogotá.— El líder opositor Juan Guaidó, quien se proclamó hace casi un año presidente encargado de Venezuela, burló nuevamente la prohibición de salir del país sudamericano y viajó a Colombia, donde ayer se reunió con el mandatario Iván Duque y hoy sostendrá un encuentro con el secretario estadounidense de Estado, Mike Pompeo.
“Vamos a consolidar el apoyo del mundo para lograr la Libertad de Venezuela”, tuiteó Guaidó durante su reunión con Duque, quien lo recibió con honores oficiales. El gobierno colombiano es uno de medio centenar que reconoce a Guaidó como mandatario encargado venezolano.
El también jefe del Parlamento de mayoría opositora agradeció el apoyo de Colombia “a la lucha del pueblo venezolano. Generaremos las condiciones que nos conducirán a la Libertad”, apuntó Guaidó, augurando una vuelta a Venezuela “llena de buenas noticias”.
Duque, por su parte, describió como “muy productiva” la reunión de trabajo “con el Presidente de Venezuela. Compartimos avances en atención a migrantes radicados en Colombia, y resaltamos la importancia de restablecer la democracia en el vecino país”.
El encuentro precede al que sostendrá hoy Guaidó con Pompeo, en el marco de la Cumbre Hemisférica de Lucha contra el Terrorismo.
El secretario de Estado, que iniciará el lunes su séptima gira por Latinoamérica y el Caribe, afirmó que tiene “prisa” de reunirse con Guaidó y reafirmó los planes de Washington para que Venezuela tenga “elecciones libres y justas”. Estados Unidos no reconoce a Nicolás Maduro como presidente.
“Nuestra misión en Venezuela no cambió. Estamos convencidos de que los venezolanos se merecen un mejor 2020 de lo que vivieron en 2019. Maduro ha sido destructor. Millones de personas debieron abandonar el país para ir al país al que estoy viajando, Colombia”, dijo Pompeo a los periodistas que lo acompañan en el avión que lo traslada hacia Bogotá desde Berlín, donde participó en una conferencia internacional sobre Libia.
“Nuestra misión es llegar a elecciones libres y justas para que los venezolanos puedan tener unos comicios presidenciales representativos y que se pueda recomponer la economía venezolana”, añadió.
Las conversaciones de Pompeo con el jefe opositor venezolano apuntan a revitalizar la campaña internacional que lidera Estados Unidos en busca de un cambio de gobierno en Venezuela. En 2019 Guaidó fracasó en su propósito de deponer a Maduro, aun cuando asegura haberlo “intentado todo”. Su popularidad cayó de 63% en enero a 38.9% en diciembre, según la encuestadora Datanálisis.
La Casa Blanca, de su lado, ha descargado una batería de sanciones contra Venezuela, incluido un embargo petrolero, y endurecido su posición con Nicaragua y Cuba, países a los que señala de conformar una “troika de la tiranía”. Colombia sigue firme en su apoyo a la cruzada de estadounidense contra Maduro, a quien acusa de ofrecer protección en su territorio a grupos rebeldes colombianos considerados terroristas por Estados Unidos.
Temprano, el diputado opositor Stalin González confirmó a la AFP la salida de Guaidó de Venezuela, aunque no precisó cuándo ni por qué vía partió el jefe parlamentario. Guaidó arrastra una prohibición de salida del país como parte de múltiples investigaciones penales y administrativas de las autoridades venezolanas, leales a Maduro.
Medios venezolanos aseguraron que el jefe parlamentario cruzó clandestinamente la frontera con Colombia, que permanece cerrada desde 2015. Guaidó ya había desafiado la misma prohibición en febrero de 2019, en su fallido intento de ingresar donaciones de Estados Unidos, para paliar la severa crisis económica en el otrora rico país petrolero.
Más allá de la reunión con Pompeo y su participación en la cumbre sobre terrorismo, la agenda de Guaidó se mantiene en secreto.
Con 100 votos de legisladores aliados, Guaidó fue ratificado el 5 de enero como jefe del Parlamento después de que las fuerzas de seguridad le impidieran acceder ese día al hemiciclo y de que un opositor rival, Luis Parra, se autoproclamara presidente de la Cámara con apoyo chavista. Maduro, quien se propone llevar a cabo elecciones parlamentarias este año, acusa a Guaidó de ser un “títere” de EU y afirma que no le importan las sanciones de este país.