La medicina tradicional o “maya Dzak” es muy recurrida por los habitantes del municipio de Lázaro Cárdenas para curar sus dolencias, pese a la existencia, ya, de la medicina científica y la tecnología que ha desarrollado, dijo la representante del gremio, María Piedad Tuz Ramírez.
La Presidenta del Comité de Mujeres que se dedican a la medicina tradicional en la comunidad de San Ángel, añadió que la herbolaria o medicina tradicional ha sido una herencia de los abuelos de las integrantes de ese gremio.
Ahora, dijo, ellas transmiten ese conocimiento a sus nietos, para que esta ancestral herencia no se pierda, pues, según ella, es igual de efectiva que la medina de patente.
Tuz Ramírez explicó que en su taller elaboran diversos productos que ponen a la venta en diversos puntos del estado y, con ello, mejoran la economía de sus familias.
También dijo que el hecho de ser mujeres no es un impedimento para que sigan trabajando, ya que la gente local ha adoptado el consumo de la herbolaria, sobre todo por la pandemia del coronavirus.
Por ello, dijo, la gente optó por consumir varios tipos de té, para reforzar su sistema inmunológico y tener menos posibilidades de enfermarse.
La agrupación que preside está organizada Lorenza Eaun Hau, Aida María Baas Caamal y María Enelda Baas Caamal quienes son muy solicitadas en la comunidad para que atienden diversos tipos de dolencias que se le presentan a los habitantes, tales como diarreas, fiebres, vómitos, deshidratación entre otros.
En el caso de casos graves en los que la herbolaria “no da el ancho”, los pacientes son canalizados directamente a la Casa de Salud.
Dijo que, de igual forma, antes de la pandemia elaboraban pomadas para reumatismo, gel para el cabello, shampoos de miel, de sábila, jabones para los granos, para hongos, entre otros que comercializaban, a precios diversos, en destino turísticos de Quintana Roo, e incluso, en la ciudad de México.