PLAYA DEL CARMEN | Fernando Aguileta | Reportero
De nuevo los padres de familia de la escuela secundaria Ko’oten Ka’ambal, demandaron del gobernador del Estado, Roberto Borge Angulo y del Secretario de Educación y Cultura, José Alberto Alonso Ovando a exigir a la empresa constructora del plantel terminar la primera etapa de ese éste, toda vez que tiene más de un año de estarse edificando.
Entrevistados a las puertas de la representación de la Secretaría de Educación y Cultura en Solidaridad, los inconformes amenazaban con tomar las instalaciones de la SEyC “porque estamos cansados de promesas incumplidas”.
Es justo, afirman los padres de familia, concluir el edificio antes de iniciar el próximo ciclo escolar. Sin embargo, señalan que las cuatro aulas no podrán alojar a la totalidad de nuevos alumnos, puesto que se ha superado los 300 estudiantes.
Dado el escaso avance de la obra, no se ve la posibilidad de terminar en el mes y medio de vacaciones que separan al próximo ciclo escolar, cuando se incorporarán más de un centenar de alumnos de nuevo ingreso y ve necesario contar con más espacio para impartir clases.
Habrá medidas más severas como el cierre del Centro Comunitario donde actualmente se toman clases y que ya es insuficiente, advirtieron los quejosos.
“Sólo el gobernador puede resolver esta situación, que volteé a vernos, el tiene la batuta, basta una orden para que se pongan a trabajar, si no se tiran la bolita como hasta ahora”, señala Juan José Mukul Chan, presidente de la sociedad de padres de familia, quien junto con varios padres de familia acudió a las instalaciones de la Secretaria de Educación a exigir respuestas y fecha para el término de la obra.
Consideran grave la situación porque la constructora afirma que no avanza por falta de pago, en tanto la Seyq sostiene lo contrario, señalan los padres.
Por su parte, Haide Pastrana Sánchez, enlace de los Servicios Educativos en Solidaridad, dijo que el retraso de la obra se debe al clima y situaciones administrativas de la empresa asignada al trabajo.
Cuando inició la construcción el año pasado se tuvo mucha lluvia y no había avances en la cimentación, y luego llegaron los problemas administrativos de la constructora, cuyo nombre no preciso.
En la reunión con padres, autoridades educativas y la empresa, convocada a raíz de la manifestación de inconformidad de los padres, se buscaría definir fecha de terminación de obra, pues reconoció que las condiciones actuales en las que se imparten clases no son del todo adecuadas, aunado al crecimiento de la matrícula en la colonia donde se encuentra, la Nicte Há.