Chetumal, 4 de enero.- Tuvieron que pasar tres años y la presión social que provocó el reciente feminicidio de una trabajadora hotelera de la Riviera Maya, para que la Fiscalía General del Estado (FGE) apenas este fin de semana, emitiera una alerta para localizar a Elizabeth del Rocío Ricalde Barrera, empleada del mismo lugar donde lo hacía la joven chiapaneca asesinada hace unos días.
El argumento de la dependencia para no cumplir con este requisito, es “que los familiares no interpusieron su denuncia”.
El 25 de abril de 2017, Elizabeth Ricalde Barrera publicó en su cuenta de instagram que se encontraba en el hotel trabajando y desde esa fecha no se tuvo mayor contacto.
En redes sociales, la familia expuso que “Elizabeth Ricalde también trabajaba en el hotel Hard Rock Riviera Maya y misteriosamente desapareció en el 2017 sin dejar rastro”.
Desde su desaparición los padres acudieron al hotel para pedir información sobre el paradero de su hija y los encargados se limitaron a responder que no sabían nada de ella, ya que voluntariamente se había dado de baja.
Los familiares afirmaron en sus redes sociales que nunca recibieron los papeles de la renuncia firmada por su hija, a pesar que interpusieron una denuncia por desaparición ante la Fiscalía General del Estado, nunca se logró saber de su paradero.
Luego de darse a conocer el feminicidio de Ana G. H que trabajaba en el mismo hotel y la detención de Carlos G, que se desempeñaba como guardia de seguridad de dicho centro de hospedaje, como presunto responsable, familiares de Ricalde Barrera fueron localizados y acudieron a la FGE el 31 de diciembre para interponer la denuncia correspondiente e iniciar el proceso de investigación.
Esto obligó a la Fiscalía a emitir el protocolo Alba para localizar a Elizabeth del Rocío Ricalde Barrera, ya que los familiares solo realizaron su búsqueda por las redes sociales.