En Italia, casi 40 millones de personas iniciaron ayer un nuevo confinamiento por el aumento de los contagios, debido a las variantes de coronavirus, con Roma y Milán desiertas y divididas entre la tristeza y la esperanza.
Y así, de un día a otro cambia todo, de la libertad al confinamiento, la mitad de Italia cambió a zona roja, debido al alza de contagios que se han venido generando, por ello, el gobierno ha decidido endurecer las medidas, regresando al lockdown.
La capital italiana vuelve a la soledad de sus calles y plazas, los restaurantes y bares están cerrados, y los habitantes de la ciudad eterna salieron a disfrutar del último domingo de libertad, porque a partir de ayer, y hasta pasada la Pascua, estarán en zona roja, no se podrá salir de casa a menos que tengan una justificación de salud o trabajo. Están prohibidas las visitas a familiares.