Ciudad de México.- El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) cambia las reglas no sólo para temas comerciales, también el de medio ambiente, a partir del cual si se violan compromisos se perderán beneficios para el socio infractor.
El acuerdo comercial incorpora reglas en las que se puede acusar a una exportadora que no lleve a cabo las responsabilidades ambientales, por lo que se puede abrir un panel que concluya en la imposición de aranceles, según dijeron especialistas.
Para iniciar un panel de controversia no se requiere que los acusadores prueben el incumplimiento, las muestras recaen en la parte demandada, lo que abre otro riesgo al comercio, coincidieron Ansley Consultores Internacionales y representantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
De comprobarse que la exportadora afectó al medio ambiente o incumplió un compromiso se le podrán retirar las concesiones arancelarias, es decir, imponerle impuestos para exportar.
Se planteó crear un comité interdependencias para monitorear los compromisos ambientales, e incluso habrá un mecanismo aduanero de verificación para asegurar la legalidad de los productos de flora y fauna que comercian los tres países socios.