Mérida 27 de abril 2022.- Dirigentes de cámaras empresariales de Yucatán se pronunciaron a favor de la libertad de empresa y del desarrollo del mercado, por lo que manifestaron su oposición al control de precios como medida antiinflacionaria que propuso el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En entrevistas por separado, los presidentes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Beatriz Eugenia Gómory Correa, y de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Raúl Asís Monforte González, dijeron que el control de precios es una medida artificial que podría ser perjudicial a mediano y largo plazo para el consumidor final.
El presidente de México reiteró el pasado 25 de abril, en su habitual conferencia de prensa, la necesidad de establecer un control de precios, en particular en los productos de la canasta básica, a fin de que las familias mexicanas no sigan siendo afectadas por el alza generalizada y sostenida de la inflación.
“Son medidas que momentáneamente podrían parecer buenas, pero el tema de alza de precios depende de situaciones coyunturales a nivel internacional y no puede forzarse que esos precios no se eleven”, dijo la titular de la Coparmex en referencia a los granos, de los que Ucrania, involucrada en un conflicto bélico, es productor mundial.
Para Monforte González, el control de precios es una medida que no debería de existir, “porque cuando trata de forzar algo, muchas otras cosas salen de balance y se desajustan”.
A su vez, Gómory Correa manifestó la necesidad de generar otras alternativas y atender casos particulares, “que es lo que se puede hacer”, pero insistió en que el control forzado de los precios no va a traer nada bueno para la economía.
Monforte González planteó como alternativa de control de la inflación que, de manera voluntaria, las empresas puedan sacrificar un poco las utilidades como una medida de respuesta a una necesidad social.
“Hay causas de la inflación que pueden estar a nuestro alcance trabajar como son los insumos locales, la mejora de la competitividad y la eficiencia de las empresas, lo que puede reducir costos”, propuso el presidente de la CMIC.
Sin embargo, ambos empresarios reconocieron que hay causas que rebasan la voluntad de las propias empresas de mantener los costos como son los sobreprecios en los granos y los energéticos provocados por la guerra entre Rusia y Ucrania.
“Necesariamente, eso impacta en la producción de bienes y servicios a nivel global así como en los fletes de los productos que no son generados localmente y sobre esas variables no tenemos mucha influencia”, reconoció el dirigente de los empresarios de la rama de la construcción.
Asimismo, el dirigente subrayó que los precios motivados por factores internacionales rebasan cualquier capacidad de control, incluso la del propio Estado.
El presidente de la CMIC expuso que en la rama de la construcción existen materiales de importación, cuyos costos de fletes registran variaciones por el alza de combustibles y es imposible, dijo, contener sus precios.
Sin embargo, indicó que en Yucatán existen agregados del ramo de la construcción como la fabricación de concreto, cemento, bloques, bovedillas y otros acabados, sector en el que puede haber una proveeduría local con menor impacto inflacionario respecto a los metales como el cobre y el aluminio.
Monforte González dijo que es imposible determinar la fecha tope de variación a los precios de los energéticos, ya que ello depende del fin del conflicto entre Rusia y Ucrania, tema del que existe, dijo, incertidumbre, pese a los llamados a la paz y al diálogo de líderes religiosos y organizaciones internacionales.
López Obrador reiteró el lunes pasado la necesidad de aplicar un sistema antiinflacionario, para lo cual, anunció que sostendrá reuniones con empresarios y productores la próxima semana, para revisar esa alternativa.
Sin embargo para muchos especialistas, el control de precios traería efectos adversos para la economía mexicana que ha registrado incrementos en su inflación, particularmente en este mes.
De acuerdo con indicadores del Banco de México, en marzo pasado el país alcanzó la segunda máxima inflación anual de 8-07 por ciento, sólo equiparable a la registrada en noviembre pasado que fue de 8.35. En enero y febrero de este año, la inflación anual fue de 7.6 y 7.7, respectivamente. (Infoqroo-Información y Poder)